Un enviado de la Santa Sede pasó 10 días en Polonia revisando los reportes de supuesta negligencia de un arzobispo retirado de Cracovia que fungió como asesor de alto rango del fallecido papa san Juan Pablo II, informó la embajada del Vaticano en el país el sábado.
SurFlorida / AP
La embajada indicó que entre el 17 y 26 de junio, el enviado, el cardenal retirado Angelo Bagnasco, sostuvo una serie de reuniones y revisó documentos.
“El objetivo era verificar señales, también hechas en público, de negligencia del cardenal Stanislaw Dziwisz durante su periodo como arzobispo de Cracovia (2005-2016)”, señaló la embajada en un comunicado.
Bagnasco está por presentar sus hallazgos en el Vaticano.
Un sacerdote en Polonia, el reverendo Tadeusz Isakowicz-Zaleski, dijo que en 2012 él personalmente le entregó a Dziwisz una carta que contenía evidencia de abuso sexual a un monaguillo de 12 años cometido por un sacerdote. Dziwisz primero lo negó y sugirió que el asunto debería ser investigado, pero después dijo que la carta había sido encontrada.
La víctima, Janusz Szymik, dijo que no hubo reacción de Dziwisz.
Isakowicz-Zaleski afirma que fue interrogado recientemente sobre “cierto arzobispo polaco” por una comisión del Vaticano que llegó a Polonia específicamente para investigar el asunto.
“Eso significa que el papa Francisco probablemente pierde su paciencia con los líderes del episcopado polaco”, dijo Isakowicz-Zaleski.
El Vaticano ha estado investigando reportes, también en la prensa polaca, sobre la presunta falta de reacción de algunas personalidades de la Iglesia católica de Polonia a los reportes de abuso sexual a menores. Algunos obispos y arzobispos recientemente fueron sancionados por el Vaticano y les prohibieron participar en ceremonias religiosas y laicas.