Sólo se llevan disputadas dos fechas de la NFL y ya son varios los equipos que han tenido que resignarse a perder a algunas de sus grandes estrellas durante toda la temporada, o en el mejor de los casos varias semanas, como consecuencia de la plaga de lesiones que azota a la competición.
Sur Florida/Marca
La falta de pretemporada en una disciplina donde el contacto es ley y que ya de por sí suele acabar cada curso con numerosos jugadores pasando por la enfermería podría ser una de las explicaciones a este hecho, que ha cobrado especial relevancia a lo largo del último fin de semana.
Saquon Barkley
Quizás el caso más mediático ha sido el de Saquon Barkley, running back de los New York Giants que fue elegido número 2 del ‘draft’ de 2018 sólo por detrás de Baker Mayfield, quarterback de los Cleveland Browns. El corredor del cuadro neoyorquino no volverá a jugar esta campaña tras sufrir una rotura del ligamento cruzado anterior en el transcurso del duelo que los suyos acabaron perdiendo por 13-17 contra los Chicago Bears.
Nick Bosa y el drama de los 49ers
Idéntica lesión ha castigado al defensive end Nick Bosa, integrante de los San Francisco 49ers y novato del año en el 2019. En el caso del plantel que en febrero perdió la Superbowl tampoco pudieron acabar el partido ante los Jets los running backs Raheem Mostert y Tevin Coleman, el defensive tackle Solomon Thomas y el quarterback Jimmy Garoppolo. Todos ellos se suman a la baja anterior de George Kittle, uno de los mejores tight ends de la liga.
Christian McCaffrey
También con gran cartel cuenta Christian McCaffrey, running back de los Carolina Panthers. Indiscutible en su puesto dentro de la franquicia de Charlotte, se le espera ausente entre un mes y un mes y medio por problemas en el tobillo que hicieron acto de presencia en el cara a cara ante los Tampa Bay Buccaneers de Tom Brady.
Una plaga
Asimismo han caído a lo largo de las últimas semanas otros en su posición como Marlon Mack (Indianapolis Colts), a quien no se verá hasta el 2021; Le’Veon Bell (New York Jets), Phillip Lindsay (Denver Broncos), Damien Harris (New England Patrios) o el prometedor rookie Cam Akers (Los Ángeles Rams).
La plaga tampoco es ajena a los receptores. Michael Thomas, wide receiver de los New Orleans Saints, apura los tiempos para retornar a los terrenos de juego después de dar el susto en la jornada inaugural mientras se sigue pendiente de lo que sucede con otro primer espada en ese lugar como Davante Adams (Green Bay Packers) después de que se retirara antes de tiempo contra Detroit.
Al igual que ellos han caído también de forma más o menos grave Courtland Sutton (Denver Broncos), Kenny Golladay (Detroit Lions) Sterling Shepard (New York Giants), Breshad Perriman y Denzel Mims (New York Jets), Parris Campbell (Indianápolis Colts), Tyrell Williams (Las Vegas Raiders) o A.J. Brown (Tennessee Titans).
Von Miller y Drew Lock
No termina ahí la lista pues a ella se añaden otros como el carismático Von Miller y su quarterback Drew Lock (Denver Broncos), el también QB Tyrod Tylor (Los Ángeles Chargers) o el tight end Blake Jarwin (Dallas Cowboys). En el caso de estos últimos su baja le ha permitido aprovechar la oportunidad para brillar a sus recambios naturales, Justin Herbert y Dalton Schultz.
“Pienso que sin duda es por la falta de pretemporada. La falta de tiempo para poder preparar bien en el campo esta campaña hace que muchos jugadores se puedan lesionar. Pero también es cierto que el fútbol americano es un deporte de colisión y la verdad es que las lesiones están a la orden del día”, indica Bart Iaccarino, General Manager de los L’Hospitalet Pioners, a EFE.
“Pienso que la NFL ha empezado demasiado pronto. Creo que hubieran podido posponer un poquito el inicio para darle la oportunidad a los equipos de prepararse bien e incluso de poder hacer una mini pretemporada de uno o dos partidos para que llegasen más preparados a la liga. Pero allí priman los intereses económicos y no otra cosa”, opina.
Esta situación podría condicionar la lucha por el anillo de campeón: “Creo que sí. Es una parte clave mantener el equipo con salud para llegar a la Superbowl. Se ve en los mismos 49’ers, que hace dos años estaban sin Jimmy Garoppolo y el pasado, con él de titular y todo el equipo titular, llegaron a la final. Es parte de tener el mejor equipo en el campo siempre”.
Mientras, en España, toman nota y esperan a poder volver a jugar: “Estamos todos un poquito pendientes de lo que va a pasar. Nuestro plan ahora es tener dos o tres semanas de preparación. El año pasado hicimos un plan que duraba todo el año sobre la preparación física y este año es algo diferente, nos amoldamos a la nueva realidad. Esperamos poder competir bajo las medidas que nos haga llegar el CSD y la Liga Nacional de Fútbol Americano”.