Una investigación del Sun Sentinel ha llevado a que jefes de policía y funcionarios electos del sur de la Florida tomen medidas enérgicas contra los policías que viajan a exceso de velocidad, con amenazas de castigos severos y tecnología de seguimiento.
Una ciudad puede incluso emplear la misma técnica que el diario para identificar a los agentes que exceden con frecuencia el límite de velocidad: los transponders del SunPass en sus carros patrulleros.
La reacción es una respuesta a una serie de artículos del Sun Sentinel que concluyó que casi 800 agentes de una docena de entidades policiales condujeron a entre 90 y 130 millas por hora durante un período de 13 meses, muchas veces cuando iban o regresaban del trabajo.
“Por lo menos, en los casos más graves pueden perder ahora mismo el privilegio de llevarse el carro patrullero a casa”, dijo Ric Bradshaw, del Condado Palm Beach, quien ordenó una investigación interna. Si no se responde al problema y se aplica una disciplina severa… entonces el mensaje es que todo marcha bien. Y no marcha bien”.
Como resultado de la investigación del Sun Sentinel:
• Howard Harrison, jefe de la Policía de Plantation, ordenó a su departamento que comenzaran a usar aparatos GPS en los vehículos patrulleros para enviar alertas cada vez que un agente supera cierta velocidad. “No creía que lo iba a necesitar, pero ahora sí”, dijo el jefe policial.
• Judy Paul, alcaldesa de Davie, dijo que desea revisar rutinariamente la información de los GPS de los agentes para identificar a los que infringen el límite de velocidad en el municipio. “Es necesario que los hagan responder por su comportamiento y disciplinarlos si infringen la ley”, agregó Paul.
• El gobierno municipal de Sunrise estudia la posibilidad de instalar aparatos GPS en sus patrulleros. El alcalde Mike Ryan dijo que era “una vergüenza” que el dinero de los contribuyentes tenga que gastarse en asegurar que los policías no infringen la ley que deben hacer cumplir.
“Quizás no tenemos otra opción, dijo el alcalde. “La gran mayoría de nuestros agentes se comportan con responsabilidad todos los días, pero esta serie ha identificado preocupaciones reales”.
• El gobierno municipal de Margate podría supervisar el historial del SunPass de los agentes para identificar a los que les gusta correr. El jefe policial Jerry Blough dijo que explora “todas las opciones”, incluyendo revisiones al azar.
Policías de la Florida han causado al menos 320 accidentes desde el 2004, en los que han muerto 19 personas, en casos de alta velocidad. Entre los muertos hay siete agentes, que chocaron sus autos a velocidades hasta 61 millas por hora por encima del límite.
• Al Lamberti, jefe de la Policía de Broward, dijo que el conducir a alta velocidad innecesariamente, especialmente fuera de servicio, es peligroso y daña la confianza del público en la policía. Lamberti dijo que investiga los incidentes documentados por el Sun Sentinel y que disciplinará a los agentes.
“Si no se puede justificar, no se puede tolerar”, dijo Lamberti. “No estamos por encima de la ley, y para hacer cumplir la ley tenemos que obedecerla primero nosotros”.
El gobernador Rick Scott está “consciente de la situación”, según un comunicado de su despacho. El gobernador supervisará un grupo especial a nivel estatal que se convocará de inmediato para revisar los casos de agentes que manejan a alta velocidad y causan accidentes.
La Patrulla de Carreteras de la Florida (FHP) ha sido alertada del problema de exceso de velocidad y “revisa sus normas para determinar si hace falta hacer cualquier cambio”, dijo el capitán Mark Brown, portavoz de la entidad.
La FHP también estudia usar la tecnología GPS para activar cámaras en los autos patrulleros cuando los agentes superen cierto límite de velocidad.
En muchos departamentos el exceso de velocidad no se ha tomado en serio, hasta ahora. Los policías que viajan a alta velocidad no son multados como el resto de los choferes, y el castigo por conducir a 100 millas por hora fuera de servicio es por lo general un recordatorio por escrito de que obedezcan el límite de velocidad, concluyó el Sun Sentinel.
Esa cultura debe cambiar, dijo Sheila Alu, comisionada de Sunrise y fiscal estatal.
“No se puede ocultar que algunos agentes infringen la ley”, manifestó Alu.
En numerosas entidades policiales se adelantan investigaciones internas sobre las conclusiones de la serie del Sun Sentinel.
“Les puedo asegurar que se tomarán medidas correctivas”, dijo Diane Veltri Bendekovic, alcaldesa de Plantation. “Hay investigaciones en curso sobre todos los casos de exceso de velocidad”.
Marlon Luis, concejal de Davie, dijo que los agentes que conducían injustificadamente a exceso de velocidad deben perder el derecho a llevarse el carro patrullero a casa.
El beneficio del auto es muy apreciado por muchos agentes, dijo Matti Herrera Bower, alcaldesa de Miami Beach.
“Me gustaría tener un auto que pueda manejar a 100 millas por hora y si se rompe alguien lo arregla”, manifestó.
Bower dijo que estaba preocupada por las conclusiones del Sun Sentinel de más de 50 agentes de Miami Beach que han conducido a más de 90 millas por hora, muchos que van o vienen desde casa desde tan lejos como el Condado Palm Beach. “No creo que eso sea un buen ejemplo”.
Disciplinar a los policías que son sorprendidos conduciendo a exceso de velocidad es sólo parte de la solución, dijo Dan Alexander, jefe de Policía de Boca Raton. Los agentes son por naturaleza personas arriesgadas y manejan más rápido, agregó, por lo que se les debe recordar constantemente que conducir a exceso de velocidad es peligroso.
“Es necesario establecer esa mentalidad”, dijo Alexander. “Es una tarea de capacitación”.
Bradshaw, el jefe policial de Palm Beach, dijo que tiene la esperanza de que la atención al exceso de velocidad entre los policías “enfrentará con la realidad a unas cuantas de esas personas que no se guían por las reglas” y las obligará a conducir más despacio.
En Miami, ya se ha hecho, dijo el mayor Jorge Colina.
Sus investigadores colocaron radares ocultos en algunos patrulleros el otoño pasado y regularmente identificaron a los que viajaban a exceso de velocidad hasta el mes pasado, cuando la noticia de la investigación del Sun Sentinel se difundió.
“En este momento”, dijo Colina, “y no sé cuánto durará, esperamos que mucho tiempo, hay una gran diferencia”.