Legisladores conservadores en Estados Unidos han presentado este año varias iniciativas de ley que afectan a la comunidad LGBTQ, pero ningún estado ha ido más lejos que Tennessee en la promulgación de leyes dirigidas a las personas transgénero.
Sur Florida / apnews
El gobernador republicano Bill Lee promulgó cinco proyectos de ley negando que estos discriminen a una población ya vulnerable y rechazando que algunas de las leyes son inviables y que podrían dañar la reputación del estado.
Los partidarios argumentan que una ley protege los derechos parentales, otras protegen a las niñas y las mujeres e incluso brindan equidad. Los oponentes rechazan esas posturas.
Colin Goodbred, un joven transgénero de 22 años que asiste a la universidad en Nueva Hampshire, dice que las nuevas leyes podrían evitar que vuelva a llamar a Tennessee su hogar. “Han dejado muy claro que no quieren personas trans en el estado”, dice.
El surgimiento de Tennessee como un líder anti-LGBTQ parte de un cambio político hacia la derecha en un estado que los republicanos ya controlan firmemente. El predecesor republicano de Lee pisó el freno de algunas leyes conservadoras, pero las enfáticas victorias electorales del Partido Republicano impulsadas por un fuerte apoyo al expresidente Donald Trump han envalentonado a los legisladores desde entonces. Ese es el panorama político en el que Lee está lanzando su candidatura a la reelección para 2022.
Las legislaturas en otros 30 estados, la mayoría de ellos controlados por republicanos, han promovido iniciativas contra la comunidad LGBTQ, como restringir la posibilidad de ingresar a equipos deportivos según su identidad de género o tener atención médica que confirme el género para menores transgénero. Human Rights Campaign, una organización que aboga por los LGBTQ, ha calificado el 2021 como el peor año en términos de leyes para esta comunidad en la historia reciente.
Tennessee prohibió este año a los atletas transgénero practicar deportes para niñas en escuelas públicas. El estado está a punto de convertirse en el primero en exigir que los edificios gubernamentales y las empresas que están abiertas al público coloquen letreros si permiten que las personas trans utilicen baños para varias personas y otras instalaciones asociadas con su identidad de género.
Mientras tanto, las escuelas públicas pronto se arriesgarán a perder demandas si permiten que los estudiantes o empleados transgénero usen baños o vestidores para varias personas que no reflejen su sexo al nacer. Lee también firmó una legislación que requiere que los distritos escolares avisen a los padres 30 días antes de que se les enseñe a los estudiantes sobre la orientación sexual o la identidad de género, permitiéndoles optar por no participar en la lección.
“Tennessee está ganando la corona por ser el estado del odio”, dijo Sasha Buchert, abogada senior de Lambda Legal.
Otros estados como Arkansas, Alabama, Mississippi y Virginia Occidental también han promovido leyes similares.
La reciente ola de proyectos de ley ha contado con el apoyo de grupos conservadores como la Heritage Foundation y la Alliance Defending Freedom, y más después de la orden ejecutiva del presidente demócrata Joe Biden que prohíbe la discriminación basada en la identidad de género.