Revirtiendo una tendencia a la baja de tres años, la cifra de indocumentados cubanos que fueron interceptados en el mar o llegaron a las costas estadounidenses en los pasados 12 meses se elevó en más del doble, lo que desató preguntas sobre las razones detrás del cambio.
Unos 1,700 cubanos fueron interceptados o alcanzaron territorio norteamericano en el año fiscal 2011, que terminó el 30 de septiembre, de acuerdo con cifras compiladas por El Nuevo Herald y provenientes de agencias de Seguridad Interior. En el año fiscal 2010 la cifra ascendió a 831.
Las intercepciones de la Guardia Costera de EEUU se elevaron de 422 a 1,000 y los desembarcos en las costas de EEUU de 409 a casi 700. Mientras tanto, las llegadas a los puntos fronterizos estadounidenses –casi todas a la frontera con México– apenas cambiaron de 6,219 a 6,300.
Los balseros cubanos en alta mar
Las cifras reflejan el primer aumento desde el año fiscal 2007, cuando el total llegó a 19,710, mucho más de las 16,226 en el año fiscal 2006. La cifra bajó a 16,260 en el 2008 y a 8,113 al año siguiente.
Algunas de las cifras fueron obtenidas por El Nuevo Herald el 20 de septiembre y podrían cambiar cuando las agencias el gobierno de EEUU haga públicos más tarde este mes sus números finales.
Mientras que el aumento durante el pasado año podría parecer relativamente modesto, el fin de la tendencia al descenso y el crecimiento de un 14 por ciento en la cifra total provocó mucha especulación sobre la causa del incremento.
Arturo Cobo, un empresario de Cayo Hueso que está en contacto regular con algunos de los inmigrantes indocumentados y sus familiares, dijo que la estancada economía de la isla está llevando a muchos cubanos a tratar de buscar una mejor vida en el extranjero.
“La economía esta cada día peor. Menos dinero, menos alimentos, menos de todo”, dijo el activista habanero Elizardo Sánchez, jefe de la ilegal pero tolerada Comisión Cubana para los Derechos Humanos y la Reconciliación Nacional.
El bloguero habanero Orlando Luis Pardo Lazo consideró que quizás el aumento es simplemente parte de “una tendencia natural de la antropología del cubano –a escapar–, un proceso en que los números caen, pero la presión se va acumulando y entonces crecen los números”.
El gobierno de Raúl Castro también puede “hacerse de la vista gorda a algunas de las salidas como una válvula de escape contra el crecimiento del descontento”, destacó Cobo, al referirse al aumento de las protestas de los disidentes durante los dos pasados años.
También es posible, agregó, que el fin de la crisis económica en EEUU ha hecho más fácil para los cubanoamericanos pagar las cantidades demandadas por los contrabandistas para traer a sus parientes y amigos de la isla, usualmente de unos $10,000 por persona.
El aumento en los intentos de los cubanos indocumentados por llegar a Estados Unidos parece coincidir con las propias cifras del gobierno cubano, que muestran que la emigración legal creció casi un 3 por ciento del 2009 al 2010.
Con una población de 11.2 millones, Cuba registró 38,165 emigraciones legales el año pasado, comparadas con las 36,564 del 2009, de acuerdo con un informe de este verano de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE).
Ciertamente, unos 318,000 cubanos llegaron a Estados Unidos, tanto legal como ilegalmente, entre el 2000 y el 2009, de acuerdo con un estudio de Jorge Duany, un profesor de la Universidad de Puerto Rico que sigue la diáspora cubana.
Existen pocas dudas de que grandes cifras de cubanos desean dejar la isla de régimen comunista, de acuerdo con un despacho escrito en el 2009 por diplomáticos estadounidenses en La Habana y suministrado por Wikileaks a McClatchy, que es propietaria de El Nuevo Herald.
“La emigración se mantiene como una obsesión virtual para muchos cubanos, y en especial, pero no de modo exclusivo, para los jóvenes”, destacó el cable. “Gran parte del público cubano [está] ansioso por dejar la isla”.
El flujo de la emigración en Cuba ha variado ampliamente, con salidas masivas en 1980, cuando la oleada del Mariel trajo a 125,000 refugiados a las costas de EEUU, y en 1994, durante la Crisis de los balseros, cuando salieron 37,191 cubanos de la isla.
Pero es mucho más difícil establecer por qué las cifras de emigrantes cubanos indocumentados crecieron del año fiscal 2003 al año fiscal 2007, empezaron a caer en el año fiscal 2009 y han aumentado ahora de nuevo.
Cuando los números descendían, los analistas argumentaron que se debía a la crisis económica en EEUU y las dificultades para pagar las tarifas de los contrabandistas; un mayor patrullaje por parte de las Guardias Costeras de EEUU y Cuba y un aumento de las acciones judiciales en EEUU y Cuba contra los traficantes de personas.
El cable de Wikileak destacó que la embajada mexicana en La Habana ha informado que 31 mexicanos estaban encarcelados en Cuba en el 2009, “todos, excepto un puñado, condenados por cargos de contrabando de inmigrantes”.
Pero el cable notó que la crisis económica cubana puede no ser un factor porque, la emigración cubana “históricamente no ha sido muy influenciada por las fluctuaciones económicas en Estados Unidos”.
En su lugar, el despacho reclama que la razón principal para el descenso fue el incremento de oportunidades para la emigración legal creado por los cambios en los procedimientos para las visas de EEUU y los requerimientos para la ciudadanía de España.
El programa de EEUU Parole para la Reunificación de la Familia Cubana, diseñado para acelerar la emisión de visas y permisos de residencia, adelantó el procesamiento de una larga lista de solicitudes atrasadas para la entrada legal a EEUU, de acuerdo con el cable.
La nueva ley española permitió a decenas de miles de cubanos descendientes de abuelos españoles obtener la ciudadanía española, que trae con ella el derecho a dejar Cuba sin el permiso de salida requerido para los ciudadanos cubanos. (EL NUEVO HERALD)