Han pasado ya diez años desde que Scarlett Johansson se pusiera por primera vez en la piel de ‘Black Widow’, el personaje de Marvel que pronto estrenará su propia película y que, hasta ahora, ha aparecido regularmente en otras cintas de la franquicia como las de las sagas ‘Iron Man’ y ‘Los Vengadores’.
SurFlorida / El diario NY
A lo largo de todo este tiempo, la estrella de cine ha podido contribuir poco a poco a la transformación de una heroína que, a su juicio, ya se ha desprendido por completo de esa “híper sexualización” que solía definir a las féminas del mundillo en su proyección tanto en la gran pantalla como en los cómics. Además de celebrar este cambio de tendencia, la intérprete estadounidense lo ha atribuido en parte a su propio proceso de madurez personal.
“Obviamente han pasado diez años y muchas cosas han ocurrido desde entonces. Yo también tengo una comprensión diferente y más evolucionada de mí misma. Como mujer, me encuentro en una etapa diferente de la vida, ¿no?”, ha explicado la artista, casada ahora con el cómico Colin Jost y madre de una niña llamada Rose, fruto de un matrimonio anterior con Romain Dauriac, en conversación con el portal de noticias Collider.
Como era de esperar, en las próximas incursiones de ‘Black Widow’ -o de Natasha Romanoff, el nombre real del personaje- no tendrán cabida expresiones que la cosifiquen o que resulten denigrantes dado el importante papel que juega en el Universo Marvel. Ella misma ha hecho referencia a algunos comentarios que Tony Stark -o Iron Man, interpretado por Robert Downey Junior- pronunciaba sobre ella durante la cinta de presentación de la heroína, en la que alababa sus curvas o subrayaba en exceso su atractivo físico.
“Cuando echas la vista atrás y vuelves a visionar ‘Iron Man 2’, además de recordar lo bien que nos lo pasamos y todos los buenos momentos que nos dio el rodaje, también te sorprendes de lo híper sexualizado que estaba mi personaje, pero hace mucho que nos alejamos de todo eso. En esa película se habla de ella como si fuera una pieza de carne, en realidad. Incluso Tony se refiere a ella como algo a lo que le gustaría darle. Puede que en esa época eso se considerara un piropo”, ha reflexionado.