Rusia anunció el martes que el rompehielos de propulsión nuclear más grande y de mayor potencia del mundo partió en un viaje de dos semanas al Ártico como parte de los planes de Moscú para aprovechar el potencial comercial de la región.
Sur Florida/Reuters
Conocido como “Arktika”, el rompehielos nuclear salió de San Petersburgo y se dirigió al puerto ártico de Murmansk, un viaje que marca su entrada en la flota de rompehielos de Rusia.
La empresa estatal rusa Rosatomflot ha calificado al buque como el rompehielos más grande y poderoso del mundo. Tiene más de 173 metros de eslora, está diseñado para albergar una tripulación de 53 personas y puede romper bloques de hielo de casi tres metros de espesor.
El barco se considera crucial para los planes de Moscú de desarrollar la Ruta del Mar del Norte, que va desde Murmansk hasta el estrecho de Bering, cerca de Alaska.
Con unos ciclos climáticos cada vez más cálidos, Rusia espera que la ruta se convierta en un mini Canal de Suez, reduciendo los tiempos de transporte marítimo de Asia a Europa.