El dictador Raúl Castro, primer secretario del Partido Comunista de Cuba, propuso el viernes un diálogo respetuoso con Estados Unidos, a pesar de que, durante su período de mandato siempre mantuvo el discurso hostil con el vecino del norte. Ocurre al anunciar que deja elcargo, la posición de mayor poder en la isla.
Sur Florida / Diario las Américas
“Ratifico desde este congreso del Partido la voluntad de desarrollar un diálogo respetuoso y edificar un nuevo tipo de relación con los Estados Unidos”.
No obstante se atrincheró en el mismo argumento de siempre “sin renunciar a los principios de la revolución y el socialismo”.
Dijo en el primer día del octavo congreso del Partido Comunista.
Mientras, en las calles de La Habana, sin turistas debido a la pandemia, los cubanos parecen más preocupados por la escasez de alimentos.
Las largas filas frente a los supermercados y la espiral inflacionaria que desató la reciente unificación de las dos monedas que tenía el país.
Para Norman McKay, analista de la Unidad de Inteligencia de The Economist,.
“La salida de (Raúl) Castro es un acontecimiento histórico no sólo porque marca el fin (En teoría) de una dinastía que ha durado más de 60 años, sino también porque se produce en medio de un período de importantes dificultades y perturbaciones económicas”.
En los últimos meses, Cuba ha experimentado una inédita agitación social, impulsada por la llegada reciente del internet móvil, con manifestaciones de artistas, protestas de disidentes y movilizaciones de otros sectores de la sociedad civil como los defensores de los animales.