Una madre del sur de la Florida que estaba presuntamente ebria enfrenta cargos de abuso infantil y otros delitos después de que la Policía encontró afuera de su vehículo a su hija de solo siete meses, con heridas sangrantes en la cabeza.
Sur Florida / diariolasamericas
El hecho ocurrió en la localidad de Plantation, en el condado de Broward, al norte de Miami, y compromete a una joven de 27 años identificada como Ashly Kestler, residente en Boca Ratón
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Según el relato de las autoridades, agentes atendieron un llamado de urgencia en la cuadra del 4200 y Peters Road, en Plantation, que daban cuenta de un menor que lloraba cerca de un vehículo.
Cuando uno de los oficiales llegó a la escena, de acuerdo con el reporte, halló a una niña afuera de un automóvil con la cabeza debajo de la llanta delantera del lado del conductor. La niña sangraba por la cabeza y su ropa estaba cubierta de sangre, según el informe de arresto.
Acto seguido, la Policía llamó a Plantation Fire Rescue, que trató a la niña por un corte profundo en la parte superior de la cabeza, algunos hematomas, cortes en la cara y pequeños rasguños. La bebé debió ser trasladada al hospital.
Acorde con el informe oficial, la mujer estaba “desmayada” en la posición del conductor del vehículo, con las ventanas y puertas cerradas. El auto estaba apagado y las llaves estaban en el piso del lado del pasajero.
Kestler fue sacada del automóvil para determinar si “estaba teniendo una emergencia médica o estaba bajo la influencia de una sustancia”, según el reporte. La investigación reveló que la joven había estado bebiendo, lo que le provocó un “desmayo”.
En el vehículo se encontró un arma cargada sin asegurar y una botella medio vacía de brandy.
Los detectives dijeron que la mujer no sabía que la bebé ya no estaba en el automóvil y la investigación continúa para determinar si la niña de alguna manera salió del automóvil por su propia cuenta o si fue arrojada del vehículo.
Kestler fue arrestada y trasladada a la cárcel principal del condado de Broward. La mujer enfrenta cargos de abuso infantil agravado y posesión de un arma de fuego y municiones.
La Policía descubrió que Kestler tenía órdenes judiciales activas por conducir con una licencia suspendida en el condado de Broward y una orden judicial en el condado de Miami-Dade.