Natalia Lafourcade, Residente y Alejandro Sanz ganaron los principales galardones en la entrega de los Latin Grammy, que se celebró el jueves por la noche en Miami en una ceremonia atípica marcada por la pandemia del coronavirus, donde hubo pocos premios para el reggeatón a pesar de sus muchas nominaciones.
Miami Mundo / Reuters
Lafourcade ganó el Latin Grammy al Álbum del Año, el más importante de la Academia Latina de la Grabación, por su compilación de clásicos mexicanos “Un Canto por México, Vol. 1”, aunque no estuvo presente virtualmente para recibirlo.
La artista mexicana también recibió un Grammy por su canción “Mi Religión” en la categoría de “Mejor Canción Regional Mexicana” y por “En Cantos”, un tema de iLe que interpreta junto a la cantante puertorriqueña.
Por su parte, el español Alejandro Sanz se llevó el Latin Grammy a la Grabación del Año por el álbum “Contigo”, mientras el puertorriqueño Residente -ex Calle 13-, ganó el premio a Canción del Año por “René”.
Otra de las grandes ganadoras fue Rosalía, que recibió tres gramófonos, dos de los cuales fueron por el sencillo “Yo x Ti”, Tu x Mí”, que interpreta junto a Ozuna, en las categorías Mejor Fusión/Interpretación Urbana y Mejor Canción Urbana. El tercer premio fue por el videoclip “TKN” junto a Travis Scott, que ganó como “Mejor Video Musical Versión Corta”.
Por su parte, el colombiano Carlos Vives ganó tres premios Grammy por Mejor Álbum Tropical por “Cumbiana”, Mejor Video Musical versión larga y Mejor Canción Tropical por “Canción para Rubén”, junto a Rubén Blades.
Bajo el lema “La música nos humaniza”, la ceremonia de la 21 entrega anual de los premios se realizó desde Miami de forma remota y simultánea desde varias ciudades por las restricciones de la pandemia de COVID-19, sin alfombra roja ni público.
Sin embargo, presentó shows de artistas como Bad Bunny, J Balvin, Fito Páez, Alejandro Fernández, Pedro Capó, Pitbull, Ricky Martin y Carla Morrison, entre otros.
Entre los favoritos, Ozuna recibió dos Latin Grammy, mientras J Balvin, quien tenía 13 nominaciones, ganó el premio a Mejor Álbum de Música Urbana por “Colores”.
En tanto, Bad Bunny se llevó un galardón por “Yo Perreo Sola” como Mejor Interpretación Reggeatón, una nueva categoría incorporada tras el reclamo de los reggeatoneros por considerar que tenían poca representación en los premios.
El discurso más destacado de la noche fue el de Residente, quien también ganó el Grammy a la Mejor Canción de Rap/Hip Hop por “Antes Que El Mundo Se Acabe”.
“El arte para mí está hecho para que seamos reflejo de todo lo que nos afecta, está hecho para hacernos sentir libres y para que digamos lo que sentimos sin miedo, aunque nos cueste la vida. Como artistas debemos sentirnos incómodos, para obligarnos diariamente a innovar y ser creativos”, dijo Residente desde la sala de su casa al recibir el premio.
“Y esta noche veo mucho talento, también veo a veces mucha gente con miedo a que no la metan en una playlist (…) en el arte no se puede tener miedo. Esa es la diferencia entre un negociante y un artista y nosotros somos artistas”, agregó.
El Grammy al Mejor Artista Nuevo fue para Mike Bahía, quien recibió el premio en el American Center Arena de Miami. En tanto, Ricky Martin se llevó el galardón al Mejor Álbum Vocal por “Pausa”, mientras el de Mejor Canción Pop fue para “Tutu”, del colombiano Camilo.
Antes de la ceremonia principal, hubo otra entrega de premios en donde se otorgaron las estatuillas a los ganadores de 36 categorías para dejar una decena para el show televisado.
Allí, el argentino Fito Paéz ganó dos premios al Mejor Álbum Pop/Rock por su disco “La conquista del espacio” y a la Mejor Canción Pop/Rock por “La Canción de las Bestias”.
La gala televisada fue presentada por la actriz mexicana Yalitza Aparicio, nominada al Oscar por su papel protagónico en la premiada película “Roma”, junto a los anfitriones Carlos Rivera, Ana Brenda Contreras y Víctor Manuelle.