Un cuarto estudiante, de 17 años, murió el miércoles de las heridas que sufrió cuando un alumno de segundo año abrió fuego en una escuela secundaria de Michigan el día anterior, informaron las autoridades.
Sur Florida / diariolasamericas
Las demás víctimas fatales incluyen un chico de 16 años que murió en una patrulla policial que lo llevaba al hospital. Ocho personas resultaron heridas, algunas de suma gravedad, entre ellas una niña de 14 años a la que colocaron en un respirador después de operarla.
Los investigadores aún tratan de descubrir el motivo de la matanza que se produjo el martes en la Escuela Segundaria Oxford, situada en una población de 22.000 habitantes unos 48 kilómetros al norte de Detroit, dijo el comisario Miguel Bouchard, del condado de Oakland.
“La persona que conoce mejor el motivo no habla”, dijo en conferencia de prensa el martes por la noche.
Agentes de policía acudieron a la escuela a la hora del almuerzo cuando un centenar de llamadas al número de emergencias 911 informaron que escucharon disparos. Arrestaron al estudiante minutos después de arrobar. Alzó las manos al ver que se acercaban los agentes, dijo Bouchard.
El padre del chico arrestado compró el viernes la pistola Sig Sauer de 9 mm que se utilizó en la matanza, dijo el comisario. Dijo que no sabía por qué el hombre compró la pistola semiautomática. El hijo había publicado fotos del arma y había practicado dispararla.
Las autoridades no dieron a conocer el nombre del chico.
Los cuatro estudiantes muertos fueron Tate Myre, de 16 años; Hana St. Juliana, de 14; Madisyn Baldwin, de 17, y Justin Shilling, quien murió el miércoles.
Myre murió en una patrulla cuando un agente lo llevaba a una sala de emergencias.
Un docente que que recibió una herida superficial en el hombro abandonó el hospital, en tanto siete estudiantes de entre 14 y 17 años permanecieron hospitalizados con heridas de distinta gravedad.
El arma que portaba el chico aún tenía siete proyectiles en el cargador cuando se rindió, dijo Bouchard.
El subcomisario Mike McCabe indicó que los padres aconsejaron al chico que no hablara con los investigadores. La policía solo puede interrogar a un menor con permiso de los padres, añadió.
La fiscal del condado de Oakland, Karen McDonald, afirmó en un comunicado que su oficina prevé presentar los cargos rápidamente y que se dará más información en las próximas horas.
Bouchard declaró que el chico no había tenido encuentros con la policía local ni, que él supiera, problemas disciplinarios en la escuela.