La realidad en Latinoamérica -en general- se ha tornado cada vez más difícil vivir.
SurFlorida / Infobae
La situación de la pandemia, provocada por el COVID19, ha paralizado el crecimiento económico y la proyección de un futuro seguro y rentable ya no parece ser una opción cercana.
Como era de esperar, la búsqueda de nuevos destinos, posibles futuros un poco menos inciertos, puso de manifiesto una problemática que, si bien venía de hace años, quedó expuesta durante el 2020.
Vivir en EEUU
Estados Unidos goza del privilegio de estar siempre en lo más alto del ránking a la hora de pensar qué destino puede ser el mejor para poder comenzar de nuevo, o continuar con un proyecto que en los distintos espacios de cada país, ya no tendría chances de prosperar.
Ahí es cuando el plan de norteamérica tiende a mostrarse como la opción más atractiva para los latinoamericanos, y en cierta manera no es una falacia.
El país continúa ofreciendo oportunidades de desarrollo para profesionales y de crecimiento para emprendedores.
Ines Bloch Law, PA, es un estudio en Florida, situado en una de las zonas mas exclusivas de Miami, a cinco minutos del glamoroso design district y de Wynwood, el polo gastronomico que mayor importancia ha adquirido en los últimos años.
Trabaja con un selecto grupo de clientes de un rango tan amplio como actores, reconocidos empresarios, creativos, inversores, deportistas, prestigiosos chefs y desarrolladores de real estate, entre otros.
En esta oportunidad, los miembros de la firma deciden desmitificar la inmigración a USA y buscar la mejor opción frente al nuevo escenario que conlleva incluso un cambio de gobierno, que promete ser más flexible.
La visa más solicitada: La E-2 de inversión en los Estados Unidos
Para obtener una visa de inversor (la E-2), los ciudadanos de países signatarios de un tratado de inversión con USA (Argentina, México, Colombia, Chile, Panamá, Paraguay, entre otros) deben invertir entre USD180.000/USD200.000, siempre dependiendo del tipo de negocio.
“Nos preguntan con frecuencia por esta visa, ya que no requiere una oferta de trabajo en los Estados Unidos. El inversor genera su propia oferta de trabajo”, nos explica, Solange Muleiro, Business Immigration Specialist de la firma.
El negocio debe estar operativo, por lo menos, con dos empleados en nómina. Debe facturar y proyectar utilidades a cinco años.
Aquellos negocios que ofrecen una atención diaria al cliente, y que requieran mayor cantidad de empleados, siempre son mejor vistos.
El Estudio recomienda a sus clientes, al momento de adquirir o instalar un negocio, que es fundamental efectuar un análisis pormenorizado y evaluar la inversión.
Esto es porque pueden presentarse diferencias tanto impositivas como legales con consecuencias que requieren ser previstas.
Es importante aclarar que la realidad del mercado no arroja una rentabilidad del 25% y no es bueno para el inversor tener la expectativa de recuperar de forma inmediata el capital invertido.
“Muchos clientes nos han confesado sentirse abandonados por los abogados en relación a los trámites pendientes o nos manifiestan la necesidad de asesoramiento en otras áreas – no sólo en inmigración” cuenta Ines Bloch.
Es por eso que la colaboración con otros equipos de profesionales es esencial para poder acompañar al cliente de forma eficiente, incluso luego de su llegada a Estados Unidos.
Vivir con visas sin inversión
Las visas O son una excelente opción para aquellos talentosos individuos -de esos que Latinoamérica tiene en cantidad- que quieren trabajar en USA.
Entre ellos están deportistas, artistas, desarrolladores de negocios, creativos, modelos, cantantes y empresarios exitosos.
Son visas diseñadas para personas que han sido, y son, exitosas en su carrera y que pueden demostrar con evidencia exhaustiva que se han destacado en su campo de acción.
Muchas personas creen, sin saber, que estas visas son inalcanzables y se sorprenden gratamente al conocer los requisitos.
También la visa L es una opción para transferencias de ejecutivos y/o gerentes entre empresas en el país de origen con subsidiaria en USA.
Es una visa accesible para empresas que cuenten con una estructura en el país extranjero de más de 20 empleados.
Por otra parte, existe la visa E-1 para facilitar el intercambio comercial de productos, servicios y tecnología desde, o hacia países latinoamericanos y USA.
“El intercambio de servicios ha sido un boom en estos últimos años ya que el talento latinoamericano se destaca por su calidad”.
La mayoría de estas visas son renovables, como la E-2, siempre y cuando el negocio se encuentre operativo y cumpla con los requisitos requeridos.
Pero cabe aclarar que todas son la puerta de entrada a los Estados Unidos y el primer paso para vivir la experiencia americana.
Es importante entender que estas visas mencionadas permiten llegar a Estados Unidos en un corto plazo.
Residencia permanente
Hay diversas opciones que permiten obtener la residencia permanente.
Por petición familiar, petición de empresas americanas que requieran un trabajador en USA, habilidades extraordinarias o de interés nacional.
Cada una de estas categorías tiene sus especificidades, pero otorgan una residencia permanente al beneficiario que luego puede derivar en una ciudadanía.
El Estudio se caracteriza por ofrecer una atención personalizada y acompañar a los clientes a lo largo del proceso.
El asesoramiento legal indicado garantiza un camino seguro al resultado deseado.
En virtud del éxito obtenido en los últimos webinars, la firma ofrecerá otro, de modalidad gratuita, el próximo jueves 8 de abril, por la plataforma de zoom.
Consistirá en 45 minutos de exposición sobre las opciones de visas y 15 minutos de preguntas y respuestas
