No a todos nos funcionan las mismas medidas cuando se trata de perder peso. Es innegable decir que puede ser un camino increíblemente desafiante y es bastante normal que las personas a menudo prueben varias dietas antes de aterrizar en una que les funcione para adelgazar de una manera constante y sostenible. No en vano, en los últimos meses han salido a la luz todo tipo de tendencias y sin lugar a una de las más populares, es el ayuno intermitente. Se ha posicionado como un método que beneficia la salud y es increíblemente efectivo para bajar de peso. Una nueva investigación de la Universidad de Illinois en Chicago sugiere que el ayuno intermitente, es una gran herramienta promover una pérdida de peso significativa e incluso mejorar la salud metabólica en quienes tienen obesidad.
SurFlorida / Diario de NY
Teniendo en cuenta los hallazgos publicados en un reciente informe encabezado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en 2020: entre los años 2017-2018, el 17% de los estadounidenses estaban a dieta, un 14% más que la década anterior. Sin embargo, la tasa nacional de obesidad aumentó del 34% al 42% durante ese mismo período de tiempo. Lo cual refleja el interés verídico de un porcentaje de la población en bajar de peso. Y por otra parte, es reflejo de los malos hábitos alimenticios y enfocados en el estilo de vida que sin lugar a dudas se derivan en un incremento en los casos de obesidad y diversas enfermedades crónicas.
De acuerdo con declaraciones de Krista Varady, profesora de nutrición en la Facultad de Ciencias de la Salud Aplicadas de la UIC y autora del estudio: “A la gente le encanta el ayuno intermitente porque es fácil. La gente necesita encontrar dietas que puedan seguir a largo plazo. Definitivamente es eficaz para perder peso y ha ganado popularidad porque no se necesitan alimentos o aplicaciones especiales. También puede combinarlo con otras dietas, como la popular Keto.”
Este trabajo de investigación fue publicado en la Revista Anual de Nutrición y se basó en analizar 25 estudios de investigación que involucraban los siguientes tres tipos de ayuno intermitente:
– Ayuno en días alternos: Esta forma de ayuno puede resultar algo extrema para algunos, ya que alterna entre un día festivo y un día de ayuno. En el día de ayuno, solo consume una comida de 500 calorías.
– Ayuno 5: 2: este tipo de ayuno se basa en cinco días festivos y dos días de ayuno por semana. En los cuales hay restricción calórica (500 calorías por día para las mujeres y 600 para los hombres).
– Alimentación con restricción de tiempo: este método no implica restricciones de calorías, pero promueve acortar la ventana de alimentación a entre cuatro y 10 horas al día. Y el ayuno se realiza en las horas restantes a los horarios establecidos para comer, esta alternativa se ha vuelto famosa y algunas persona apuestan por solo comer durante un lapso de 4 horas al día.
Como dato al margen. El ayuno intermitente es un patrón de alimentación que implica ayunos regulares a corto plazo que implican no comer o restringir drásticamente la ingesta de alimentos durante ciertos períodos de tiempo. Es una de las tendencias dietéticas más populares, para mejorar la salud, prevenir enfermedades, bajar de peso y vivir mejor. De acuerdo con un estudio encabezado por The Endocrine Society, el cual se inspiró en explorar los beneficios relacionados con la práctica del ayuno intermitente: comer todos los alimentos y bocadillos dentro de un período de ocho a 10 horas puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades metabólicas, incluidas la diabetes y las enfermedades cardíacas
De los estudios examinados, muchos mostraron que la alimentación restringida en el tiempo permitió a los participantes con obesidad perder un promedio del 3% de su peso corporal, sin importar la duración de su ventana de alimentación. Por otro lado, los que participaron en ayunos en días alternos bajaron entre un 3% y un 8% de su peso corporal durante un período de tres a ocho semanas. Sorprendentemente, aquellos que hicieron la dieta 5: 2 tuvieron resultados de pérdida de peso comparables a los que hicieron ayuno en días alternos, a pesar de tener menos períodos de ayuno.
En general, el porcentaje de peso que los participantes perdieron siguiendo estos dos tipos de ayuno, se compara con los resultados que se pueden lograr siguiendo una dieta tradicional restrictiva en calorías ¿La mejor parte? Los participantes que hicieron ambas dietas en ayunas mantuvieron el peso, manteniendo una pérdida de peso promedio del 7% durante todo un año.
Si bien, mucho se ha dicho sobre el ayuno y a la fecha existen numerosos estudios que avalan sus beneficios. Está investigación es un trabajo más que ofrece una gran alternativa para las personas interesadas en perder peso, no sugiere que el ayuno es más eficaz que la dieta tradicional. Más bien, comprueba que puede ser igual de efectivo; por lo tanto sí perteneces al grupo de personas que no les ha funcionado reducir las calorías a diario: considera probar el ayuno de días alternos o el método 5:2. Y no olvides que es indispensable romper el ayuno con alimentos densos en nutrientes, que llenen de energía y vitalidad al organismo.
