El número de estadounidenses que solicitaron beneficios por desempleo se redujo la semana pasada a 787.000, una señal de que la pérdida de puestos de trabajo puede haber disminuido ligeramente, pero aún se mantiene en niveles históricamente altos.
Sur Florida / local10
Dado que las infecciones confirmadas se acercaron a 60.000 en la última semana , el nivel más alto desde julio, muchos consumidores no han podido o se han mostrado reacios a comprar, viajar, cenar fuera o reunirse en multitudes, una tendencia que ha llevado a algunos empleadores a seguir recortando empleos. Varios estados, como Ohio e Idaho, están reportando un número récord de hospitalizaciones por el virus.
El informe del jueves del Departamento de Trabajo dijo que el número de personas que continúan recibiendo beneficios por desempleo se redujo en 1 millón a 8,4 millones. La disminución muestra que algunos de los desempleados están siendo llamados a sus antiguos trabajos o están encontrando otros nuevos. Pero también indica que muchos estadounidenses desempleados han agotado su ayuda estatal por desempleo, que generalmente expira después de seis meses, y han pasado a un programa federal de beneficios extendidos que dura tres meses adicionales.
Muchos beneficiarios desempleados ahora solo reciben pagos de desempleo estatales regulares porque un suplemento semanal federal de $ 300 ha finalizado en casi todos los estados. Y un beneficio federal de $ 600 a la semana expiró durante el verano.
El número aún elevado de solicitudes de desempleo subraya que una recuperación total de la recesión pandémica sigue estando muy lejos. El crecimiento del empleo se ha desacelerado durante tres meses consecutivos, dejando a la economía todavía 10,7 millones de puestos de trabajo por debajo de su nivel anterior a la pandemia. La tasa de desempleo sigue siendo alta en el 7,9%.
Y algunas empresas importantes siguen anunciando despidos. Aramark, un contratista de servicios de alimentos que ofrece concesiones en estadios deportivos, dijo el miércoles que despediría a 975 trabajadores en Denver, la mayoría de los cuales trabajaban en Coors Field, hogar de los Colorado Rockies. La compañía también está recortando 550 puestos de trabajo en Kansas City. La mayoría de los juegos de béisbol de las Grandes Ligas de esta temporada se jugaron con poca o ninguna concurrencia, lo que reduce la necesidad de trabajadores de concesión.
Amtrak dijo en una audiencia del Congreso el miércoles que tendría que eliminar 2.400 puestos de trabajo a menos que el Congreso apruebe la ayuda de emergencia como parte de otro proyecto de ley de estímulo.
Sin embargo, las negociaciones en el Congreso sobre otra ronda de ayuda financiera se han estancado en gran medida, con pocas perspectivas de un acuerdo antes del día de las elecciones . La presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, continúan negociando. Pero el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, advirtió a la Casa Blanca que no acepte un paquete grande al que se opondrían la mayoría de los republicanos del Senado.
A menos que el Congreso pueda acordar un nuevo programa significativo de ayuda de rescate, la mayoría de los economistas esperan que el crecimiento se desacelere en los últimos tres meses del año desde un rápido repunte en el trimestre julio-septiembre. Eso significaría una recuperación más prolongada de los empleos y la producción que la economía perdió por el coronavirus.
El hecho de que el Congreso no extienda la ayuda también agravaría las dificultades para muchos de los desempleados, que están luchando para pagar las facturas con cheques de desempleo que, en promedio, reemplazan solo un tercio de sus ganancias anteriores. Casi uno de cada seis inquilinos (11,8 millones de personas) está atrasado en el pago de su alquiler, según un análisis de los datos del censo realizado por el Centro de prioridades presupuestarias y políticas.
El número de personas cuyos beneficios estatales han expirado y ahora están recibiendo ayuda por 13 semanas adicionales de un programa federal de beneficios extendidos aumentó la semana pasada en 509.000 a 3,3 millones, dijo el gobierno.
Otras 345.000 personas solicitaron ayuda por desempleo en virtud de un programa separado que hizo que los trabajadores autónomos, los contratistas y los trabajadores autónomos fueran elegibles para recibir beneficios por desempleo por primera vez. Esas cifras no se ajustan a las tendencias estacionales, por lo que se informan por separado.
Tanto la ayuda extendida como la ayuda por desempleo para contratistas y trabajadores temporales vencerán a fin de año. Millones de desempleados se quedarían sin ningún beneficio. Una excepción son los estados con un desempleo particularmente alto, donde los trabajadores despedidos pueden recibir 13 semanas más de ayuda estatal.
