Zion Williamson estuvo parado durante buena parte de su primera temporada en la NBA por culpa de una lesión de rodilla que volvió a encender el debate sobre su estado de forma, la fragilidad de sus articulaciones y su peso para tener una carrera larga en la NBA.
Sur Florida/Marca
Su sobrepeso suscitó numerosos comentarios negativos antes de su debut en la NBA. Entre otros de su ex entrenador en la Universidad de Duke y de leyendas de la liga como Charles Barkley, que pasó por el mismo proceso que Williamson: “He oído que está en 128 kilos y no puede jugar con ese peso en la NBA. Es demasiado para sus rodillas”. Algo más despectivo fue Kendrick Perkins: “Será mejor que los Pelicans encierren a Zion Williamson en casa porque puedo oír a la buena gente de Nueva Orleans ofreciéndole todo tipo de comida”.
Zion volvió a la cancha antes del parón por culpa de la pandemia del coronavirus y aprovechó el confinamiento para someterse a una estricta dieta que dio sus frutos antes de la burbuja de Orlando, como se vio en una foto que se hizo viral en el mes de julio. Williamson habría perdido durante la pandemia 11,5 kilos de grasa que ha cambiado por 4,5 kilos de músculo fibroso, explosivo y dinámico.