La Confederación Sudamericana de Fútbol anunció el martes que las finales de las torneos de clubes del continente Copa Libertadores y Copa Sudamericana se disputarán sin público presente en los estadios debido a los numerosos casos de coronavirus en la región.
Sur Florida / reuters
La final de la Libertadores -la principal competencia de clubes del fútbol sudamericano- se jugará el 30 de enero en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, mientras que el encuentro decisivo de la Sudamericana se realizará una semana antes en el estadio Mario Kempes de la provincia argentina de Córdoba.
“La actual situación de la pandemia de COVID 19, todavía en expansión en Sudamérica, no permite la realización de un evento de esta magnitud e importancia con la presencia de público, aún con un aforo reducido”, dijo la Conmebol en un comunicado.
“La resolución es coherente con la posición declarada por la Conmebol desde el inicio de la pandemia en el sentido de trabajar por el retorno de las competiciones en el continente, pero con los máximos cuidados para preservar la salud”, añadió.
Los finalistas de la Libertadores saldrán de las series semifinales entre River Plate de Argentina y Palmeiras de Brasil, y Boca Juniors de Argentina y Santos de Brasil.
Por su parte, en la Sudamericana, los clasificados al partido decisivo surgirán de los enfrentamientos entre Vélez Sarsfield y Lanús, ambos de Argentina, y Coquimbo de Chile y Defensa y Justicia de Argentina.
