Joe Biden y Kamala Harris llegan al Capitolio para la ceremonia de la toma de posesión. Ambos arribaron acompañados de sus cónyuges.
Los invitados en general, entre los que están senadores y congresistas, participan del evento que tiene una ceñida asistencia y se hace sin público general para evitar contagios de coronavirus.
Abundante mercadería alegórica a la toma de posesión de Joe Biden reposa sobre una mesa sin ni siquiera un vendedor ante la ausencia absoluta de clientes, debido al estado de sitio que las autoridades han impuesto sobre la capital estadounidense.
Las tomas de posesión son eventos a los que usualmente acuden los estadounidenses de forma masiva. Pero este año es atípico, por la pandemia y el temor a la violencia tras el asalto al Capitolio días atrás.