La Asociación Nacional de Gobernadores planteó este domingo al gobierno del presidente Donald Trump interrogantes sobre cómo planifica distribuir una futura vacuna contra el covid-19 en Estados Unidos, algo con lo que el mandatario se mostró ávido antes de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre pero no sucederá hasta que sea aprobada una de forma segura.”La distribución e implementación de una vacuna es una tarea masiva que no puede ser manejada sin una coordinación logística, planificación y ayuda financiera significativas entre los estados y el gobierno federal”, escribió en un comunicado el grupo bipartidista liderado por el demócrata de Nueva York Andrew Cuomo.
surflorida/univision
“La lista de preguntas (…) abarca el financiamiento para la administración de una vacuna, su asignación y su cadena de suministros”, agregaron en referencia a asuntos que van desde cómo será costeada para las personas que no cuenten con un seguro médico hasta cómo conseguirán las jeringas y el alcohol necesarios para inyectarlas.
“¿Puede la administración proveer más guías sobre cuáles serán los requerimientos de priorización?”, agregaron en referencia a quiénes deberían estar en primera fila para recibirla, algo que no ha sido decidido hasta el momento pero sobre lo cual ha hecho recomendaciones la Academia Nacional de Ciencia y Medicamentos.
Debido a que, en un inicio, no habrá vacunas suficientes para toda la población, la Academia esbozó un plan de 4 fases que arranca administrando la vacuna a los trabajadores en la primera línea de la lucha contra la pandemia –en hospitales, ancianatos y proveedores de cuidado en el hogar– y a las personas con condiciones preexistentes –como por ejemplo que padezcan de cáncer o condiciones graves del corazón.
Luego, plantean administrarla a los trabajadores escolares en centros educativos hasta la secundaria para, posteriormente, llegar a una población adulta joven en las universidades.
