El gobernador de Texas, Greg Abbott, dio positivo el martes en una prueba diagnóstica de coronavirus, informó su oficina, que aseguró que el funcionario se encuentra en buen estado de salud y no presenta síntomas.
Sur Florida / AP
Abbott, que se vacunó en 2020, estaba aislado en la mansión del gobernador en Austin y recibía un tratamiento de anticuerpos monoclonales, dijo el portavoz Mark Miner en un comunicado.
En tanto, los casos de coronavirus se han disparado en el estado gracias a la veloz transmisión de la variante delta, llevando a los hospitales de la entidad al límite. Más de 11.500 pacientes estaban hospitalizados con el virus hasta el lunes, los niveles más altos desde enero.
El resultado positivo en la prueba se dio a conocer un día después de que Abbott tuiteara una foto suya sin mascarilla mientras hablaba en un lugar cerrado cerca de Dallas ante un grupo de simpatizantes republicanos, la mayoría de los cuales tampoco portaba mascarilla.
Jack DeSimone, presidente del Club Republicano de Heritage Ranch, dijo que no le gustaba “tener conversaciones como esta” y rechazó comentar más sobre el evento del grupo al que asistió Abbott.
Miner señaló que el discurso del gobernador ante el grupo fue su único evento público esta semana. Comentó que Abbott arrojó un resultado negativo el lunes y que ningún miembro de su personal ha dado positivo.
Abbott se ha opuesto firmemente a ordenar el uso de mascarillas para escuelas públicas, aunque esta semana algunos distritos de las ciudades más pobladas del estado —gobernadas por demócratas— exigieron el uso de cubrebocas de todas formas. Abbott y el fiscal general Ken Paxton, quien también es republicano, llevaron a los tribunales su disputa con los distritos escolares.
La esposa de Abbott, Cecilia, dio negativo al virus. El gobernador se había sometido a pruebas diarias de coronavirus y Miner señaló que “todas las personas con las que el gobernador ha estado en contacto hasta el día de hoy han sido notificadas”