Son cada vez más las actrices que se quejan abiertamente de que las únicas preguntas que les hacen los periodistas en una alfombra roja sean sobre sus vestidos. Sobre todo porque eso no les pasa a sus compañeros masculinos. Aunque si ese micromachismo lo llevan mal, mucho peor lo pasan cuando por culpa de haber elegido un diseño de corte amplio se empieza a especular si en realidad estarán ocultando un embarazo. Justo lo que le pasó a Gal Gadot en los Globos de Oro celebrados la pasada madrugada.
SurFlorida – Vanity Fair
La protagonista de Wonder Woman fue una de las pocas celebridades que acudieron en persona a la gala para entregar un premio. Lo hizo, además, a lo grande: luciendo un mini vestido blanco perlado de Givenchy con mangas transparentes y un exclusivo collar de Tiffany & Co. que la convirtió inmediatamente en una de las estrellas mejor vestidas de la noche. Y no precisamente porque la mayoría de invitados siguieron la ceremonia en pijama desde sus casas.
Pero no fue su look perfecto lo que llamó más la atención de los espectadores, sino lo holgado que era el corte de su vestido. Un detalle que rápidamente llenó las redes de mensajes de curiosos preguntándose si la excelente elección de traje de Gadot respondía en realidad a un intento de ocultar un nuevo embarazo.