El Fondo Monetario Internacional redujo levemente su pronóstico para la recuperación económica tras la recesión causada por la pandemia de coronavirus, reflejando los problemas en las cadenas de suministro y las enormes disparidades en las tasas de vacunación entre países ricos y pobres.
Sur Florida / apnews
El FMI vaticinó en julio que el crecimiento económico mundial para este año sería de 6% pero ahora calcula que será 5,9%, según el reporte Perspectivas de la Economía Mundial difundido el martes.
Estados Unidos, la mayor economía del mundo, crecerá 6% en 2021, vaticinó el FMI, reduciendo el pronóstico de 7% previsto en julio. La revisión responde a una menor actividad económica debido al aumento de casos de COVID-19, a los cortes en las cadenas de suministro y a las presiones inflacionarias.
Las economías desarrolladas en su conjunto, prevé el FMI, tendrán un crecimiento de 5,2% este año comparado con 3% para los países de bajos ingresos.
“La peligrosa brecha en las perspectivas económicas de los países sigue siendo causa importante de preocupación”, declaró el FMI.
El organismo prevé que las economías avanzadas se recuperarán totalmente del revés provocado por la pandemia en 2022, y que superarán sus crecimientos prepandémicos para el 2024.
Pero las economías en desarrollo, añade la institución, crecerán 5,5%, menos del pronosticado antes del impacto del virus en marzo del año pasado. Ello presenta una grave amenaza a los estándares de vida de esos países, indicó el FMI.
La enorme disparidad entre países ricos y pobres, añadió la institución, responde a la profunda discrepancia entre ellos en cuanto a tasas de vacunación contra el COVID-19.
El panorama económico para los países en desarrollo “se ha oscurecido considerablemente”, reflejo de la propagación de la contagiosa variante delta, que ha impulsado el saldo de muertes mundial a casi 5 millones.
En los países ricos, la tasa de vacunación es de casi 60% mientras que en los pobres es de casi 4%.
Además de las bajas tasas de vacunación, los países pobres están sufriendo los efectos de la inflación en que los precios de los alimentos están aumentando en la mayoría de ellos, indicó el FMI.