A pesar de las medidas de precaución impuestas en las residencias de ancianos en Florida, que incluyen la prohibición de visitas familiares y el aislamiento de residentes, en las últimas tres semanas, los casos de coronavirus en las residencias para adultos mayores en Florida han aumentado de 2,000 a 4,800, con 2,550 muertes entre residentes y personal, el 45% del total de muertes de COVID-19 en el estado, reportó AP.
Las muertes en los asilos para ancianos un promedio de 40 por día la semana pasada, comparado con menos de 20 por día a mediados de junio.
Alrededor de 180 de cada 10,000 residentes en cuidados a largo plazo han muerto en Florida, una tasa muy inferior a la de algunos estados del noreste durante el pico de la pandemia en marzo y abril. Nueva York registró entonces 400 por cada 10,000 y Nueva Jersey más de 1,100.
En cuanto a la ayuda federal recibida por estas residencias, el gobierno envió 14 millones de mascarillas y 13 millones de batas a los asilos, pero algunos proveedores de Florida dijeron que eran inutilizables. Otros ni siquiera las recibieron.