A pesar de la insuficiente disponibilidad de vacunas contra el coronavirus y las críticas que apuntan a una ‘mala gestión’, la Florida logra ser el primer estado del país en vacunar a más de 500.000 personas de 65 años o más y es uno de los cuatro que logra superar la cifra del millón de personas atendidas con al menos la primera dosis de la inmunización.
SurFlorida / Diario Las Américas
Según los datos publicados por el Centro de Enfermedades Infecciosas (CDC), Florida ha administrado más de 1.3 millones de vacunas, de las 2.5 millones que ha recibido, y de ellas unas 700.000 han sido recibidas por personas de 65 años y más.
Acorde a los datos, aún faltan uno 3.6 millones de personas de la tercera edad por vacunar en Florida.
De esta manera, Florida ocupa el tercer lugar en cantidad de vacunas aplicadas hasta el momento, solo superada por California y Texas que han administrado 1.6 y 1.5 respectivamente.
El estado de Nueva York ocupa el cuarto puesto con 1.1 vacunas aplicadas hasta hoy.
No obstante, esas cifras apenas representan el 5% o menos de la población en esos estados.
En el caso de Florida, tan solo significa el 5.2% de los 21.5 millones que formaban la población del estado.
Según el CDC, al menos el 50% de los habitantes deben ser vacunados con ambas dosis para obtener la deseada ‘inmunidad de rebaño’ que haría bajar drásticamente las cifras de contagios y por ende de fallecidos.
De hecho, Florida figura entre los tres estados que mayor cantidad de nuevos contagios reporta estos días, junto a California y Texas.
El estado floridano también ocupa el tercer lugar de la nación con mayor cantidad de casos acumulados, unos 1.6 millones, y el cuarto lugar en fallecimientos, con unos 24.700 reportados desde que comenzó la pandemia en marzo pasado.
“Florida mantiene firme el compromiso de dar prioridad a las personas mayores y los números hablan por sí mismos”, señaló el gobernador. Ron DeSantis.
La máxima figura del Gobierno estatal apuesta por una cantidad mayor de dosis, teniendo en cuenta la producción y la distribución del fármaco.
Y aunque Florida no ha logrado establecer un plan masivo de vacunación, dada la insuficiente disponibilidad de dosis y la política de ‘repartir’ la responsabilidad, entre condados, municipalidades, hospitales y centros médicos; surgen ideas como incluir las farmacias CVS y Walgreens, así como los supermercados Publix, en algunas zonas del estado para administrar las vacunas.
Por otra parte, la administración federal de emergencias FEMA propuso crear centros de vacunación, bajo la propuesta del nuevo gobierno nacional, presidido por Joe Biden, para expandir la aplicación del fármaco, pero DeSantis prefiere le den las vacunas.
“Vi algunas de estas cosas que Biden está publicando, que va a crear estos campamentos de FEMA. Puedo decirles que eso no es necesario en Florida”, comentó el gobernador.
“Todo lo que necesitamos es más vacuna. Consíganos más vacunas “, recalcó.
En efecto, el nuevo gobierno nacional propone estimular la fabricación y la administración de vacunas por medio de la aplicación de la ley de la producción de Defensa, o Defense Production Act, que permite al Gobierno requerir a empresas privadas satisfacer las necesidades del país.
El expresidente Donald Trump hizo uso de esa ley para fabricar más mascarillas y respiradores artificiales el año pasado