Fitzpatrick sabe que puede acelerar la llegada de Tua si los Dolphins caen contra los Bills. A pesar de lanzar tres intercepciones en la derrota del domingo pasado ante los Patriots, y de que los Dolphins anotaran con él solo un touchdown, este lunes el entrenador Brian Flores rápidamente declaró que Ryan Fitzpatrick será el quarterback titular para el primer partido en casa de los Dolphins contra los Buffalo Bills en el Hard Rock Stadium este domingo.
Sur Florida / El Nuevo Herald
De este modo despejó cualquier posibilidad de que el novato Tua Tagovailoa tomara ya el relevo, pese a que en este primer juego estuvo muy activo en el banco y comprendió rápidamente todas las jugadas y decisiones tomadas.
Tagovailoa va bien, pero todavía necesita tiempo, ya no tanto por su lesión, sino porque apenas se ha podido preparar en una atípica pretemporada. Aunque ya está listo para jugar algunos minutos y hasta asumir el rol de titular si su mentor vuelve a fallar.
Fitzpatrick sabe necesita mejorar rápidamente su juego y ser más agresivo para conservar su puesto y nada mejor que conseguir la primera victoria de la temporada.
Aunque esto es también extensivo a toda la línea ofensiva, sobre todo a su coordinador Chan Gailey.
Aún no se sabe si se podrá contar con el wide receiver DeVante Parker, quien parece recuperado de la lesión de isquiotibiales sufrida ante los Patriots, por lo Preston Williams deberá asumir una mayor carga en el plan de juego y tener listo por la otra banda a Jakeem Grant.
Además de aprovechar que los linebacker titulares de los Bills, Tremaine Edmunds y Matt Milano, pueden quedar fuera o jugar mermados, tras sufrir sendas lesiones en la victoria ante los Jets, y Buffalo carece de profundidad en este puesto.
Por otra parte, Jordan Howard y Matt Breida tienen que asumir un mayor protagonismo y ayudar en ataque alcanzando un mayor número de yardas. Ambos han visto como Myles Gaskin les ha adelantado, manejando la mayor parte de la carga de trabajo.
Tal vez Howard necesite más oportunidades por dentro, con Breida en el espacio para usar su velocidad en jugadas largas. Lo cierto es que ante los Patriots el ataque terrestre fue testimonial.
En la defensa los Dolphins deben de preocuparse por mantener a Josh Allen en el bolsillo para que no haga lo mismo que Cam Newton, sabiendo que Allen ha anotado 18 touchdowns por tierra en 29 partidos en las últimas tres temporadas.
Miami necesita encontrar en la línea defensiva hombres capaces de detener las corridas de los quarterbacks rivales, no solo Elandon Roberts, quien se espera que pueda superar el protocolo de conmoción cerebral de la NFL. Gran parte del éxito de estos delfines pasa por frenar de modo consistente el ataque terrestre.
Claro que tampoco puede descuidar el juego por aire. Si bien ante New England no estuvieron mal, esta vez tendrán que tener más cuidado con los wide receiver John Brown y Stefon Diggs. No bastará con los cornerback Byron Jones y Jamal Perry, y por momentos el novato Noah Igbinoghene, habrá que poner a un safety en la parte superior para ofrecer ayudas.
Si bien se sabe que será un partido muy difícil, se espera que en casa los Dolphins obtengan la primera victoria de la temporada. Un 0-2 podría encender las alarmas y que todos comiencen a pedir el ingreso antes de tiempo del novato Tagovailoa.
La clave en la ofensiva será su diversificación, dándole el ovoide en los espacios a los más atléticos jugadores para luego intentarlo con pases más largos. Y en defensa no dejando respirar a Allen. Pero más que nada siendo agresivos desde el minuto uno y así no tener que intentar la heroica al final.
