Después de uno de los años más complicados en décadas para completar satisfactoriamente la cadena mundial de suministros a causa de la pandemia por COVID-19, el accidente del buque Ever Given que ha provocado el bloqueo total del canal de Suez, podría acarrear el incremento de precios en varios productos en los Estados Unidos durante los próximos días, ante la afectación de un paso crucial y estratégico por el que circula poco más del 10% del comercio global.
Sur Florida / solodinero
La embarcación
cuya longitud alcanza los 400 metros con una capacidad de almacenamiento mayor a las 220,000 toneladas, se encuentra encallada en un tramo que no permite el tránsito de más navíos, por lo que el cierre ha encendido las luces de alarma sobre sus consecuencias alrededor del mundo, luego de que se tiene previsto que esta situación se extienda por semanas, antes de que el barco pueda ser encauzado a su ruta original.
Aunque ante la incertidumbre los efectos económicos se mantienen en el terreno de las estimaciones, el curso de los acontecimientos apunta a que los consumidores terminen resintiendo el impacto entre los productos que se ensamblan en Europa y se envían a Estados Unidos por esta ruta comercial establecida desde hace más de 150 años y que fue abierta en territorio egipcio como un enlace entre el mar Mediterráneo y el mar Rojo.
Conforme pasen los días, la reacción en cadena sobre los efectos del bloqueo vendría con un incremento en el transporte marítimo, materias primas energéticas e incluso la inflación mundial, afectando todo tipo de productos que pasan por el canal, desde ropa y calzado, hasta suministros energéticos y artículos de electrónica e incluso alimentos.
Sin embargo, en medio de la crisis del comercio producto del bloqueo, una de las noticias que han generado calma en los mercados es el hecho de que por lo pronto no se prevén afectaciones en los precios del petróleo debido a los acuerdos previos realizados por los países productores, mientras que los repuntes en casos de COVID-19 en Europa han obligado a tomar medidas que reducen la demanda de combustible, por lo que el abasto en el corto plazo no está comprometido.
