El vicepresidente de EEUU, Mike Pence, dijo el miércoles durante la Convención Nacional Republicana que la violencia en las calles de Kenosha, Wisconsin, el último foco de protestas raciales, tiene que “cesar”.
Sur Florida/Telemundo 51
“Déjenme ser claro: la violencia tiene que cesar, ya sea en Minneapolis, Portland o Kenosha (…) Tendremos ley y orden en las calles de EEUU”, afirmó Pence.
El vicepresidente aludió así a las protestas que han estallado en Kenosha después de que un policía le disparara siete veces por la espalda al afroamericano Jacob Blake, quien podría quedar tetrapléjico.
El martes por la noche, durante las protestas, un miliciano de 17 años abrió fuego contra los manifestantes, matando a dos y dejando a otro herido. El joven fue detenido este miércoles.
Durante su discurso, Pence aseguró que los estadounidenses saben que “no tienen que elegir entre apoyar a las fuerzas policiales y apoyar a los vecinos afroamericanos”.
“Desde los primeros día de este Gobierno, hemos hecho ambas cosas”, añadió.
El vicepresidente también insistió en la estrategia que han adoptado los republicanos de acusar al candidato presidencial demócrata, Joe Biden, de apoyar el movimiento que pide cortar fondos a los departamentos de Policía, algo a lo que de hecho se ha opuesto.
“La semana pasada (durante la Convención Nacional Demócrata), Joe Biden no dijo una sola palabra sobre la violencia y el caos que sumerge a nuestras ciudades”, dijo el vicepresidente, quien aseguró que, de ganar, el demócrata “redoblará las mismas políticas que han conducido a calles inseguras y violencia en las ciudades de EEUU”.
“La dura verdad es -dijo- que no estarán seguros en los EEUU de Joe Biden. Con el presidente Trump, siempre apoyaremos a la Policía y no vamos a cortarles fondos, ni ahora, ni nunca”.
Los jugadores de los Milwaukee Bucks, el equipo de la NBA de Wisconsin, decidieron este miércoles no saltar a la cancha en protesta por los hechos de Kenosha, provocando que la liga de baloncesto más importante del mundo cancelase todos sus partidos.
Pence reconoció que mucha gente cree que él es “un poco diferente” al presidente estadounidense, Donald Trump, pero defendió rotundamente su gestión, sobre todo en lo económico.
“En nuestros tres primeros años, construimos la mejor economía del mundo. Hicimos a Estados Unidos grande de nuevo”, dijo en referencia al lema de campaña de Trump, para luego añadir: “Y entonces llegó el coronavirus desde China”.
Pence defendió que el veto a la entrada de extranjeros desde China que impuso Trump “salvó un número incontable de vidas estadounidenses”, y describió su respuesta a la pandemia como “la mayor movilización nacional desde la Segunda Guerra Mundial”.
“La semana pasada, Joe Biden dijo que ‘no va a venir ningún milagro’ (contra el COVID-19). Lo que parece que Joe no entiende es que Estados Unidos es una nación de milagros, y que estamos en camino de tener la primera vacuna segura y eficaz contra el coronavirus del mundo para finales de este año”, recalcó.
Como hizo la primera dama Melania Trump la noche anterior, Pence tuvo palabras para “todas las familias que han perdido a sus seres queridos y que tienen familiares que todavía luchan contra la enfermedad”, pero defendió con orgullo que “se están reabriendo las escuelas” del país a pesar del avance en el número de casos y muertes.
El vicepresidente aseguró que la elección del 3 de noviembre será entre “un político de carrera que presidió la recuperación económica más lenta desde la Gran Depresión”, en alusión a Biden, “o un líder demostrado que creó la mayor economía del mundo”.
“La elección está clara: para que Estados Unidos se recupere económicamente del todo, necesitamos cuatro años más del presidente Donald Trump en la Casa Blanca”, subrayó.
El vicepresidente dio su discurso ante decenas de personas, entre ellos varios militares y excombatientes, sentados sin mascarillas ni apenas separación.
LA POLICÍA, CON TRUMP
Minutos antes, en la convención, el director de la Asociación Nacional de Organizaciones Policiales, Mick McHale, expresó su respaldo al presidente Trump ante “estos tiempos desafiantes” y el “caos” generado.
“Desafortunadamente, el caos resulta cuando las autoridades en ciudades como Portland, Minéapolis, Chicago y Nueva York toman la decisión consciente y pública de no apoyar a los agentes policiales”, dijo McHale, agente en Sarasota, Florida.
Curiosamente, todas las ciudades mencionadas por el policía cuentan con alcaldes demócratas.
EL DISPUTADO VOTO FEMENINO
Uno de los discursos más emotivos fue el de la portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, que relató sus problemas médicos para tratarse un potencial cáncer de pecho.
“Quiero que mi hija crezca en los EEUU de Donald Trump (…) Decidir tener una mastectomía preventiva fue la decisión más dura que he tomado. Pero apoyarle, fue la más fácil “, apuntó a la vez que relató el cariño mostrado por el mandatario durante el proceso.
Asimismo, Kellyanne Conway, la fiel asesora que asumió la jefatura de la campaña de Trump poco antes de las elecciones de 2016, ayudándole con el voto femenino, se dirigió de nuevo a las mujeres, el electorado que según las encuestas el mandatario está perdiendo.
“Durante décadas, (Trump) ha elevado a las mujeres a puestos de responsabilidad en los negocios y en el Gobierno. Confía en nosotras y nos consulta, respeta nuestras opiniones e insiste en que estamos en pie de igualdad con los hombres”, remarcó Conway, en el que probablemente sea su última intervención ya que ha anunciado que dejará el cargo a final de mes.
CHINA, CULPABLE
Si bien Pence volvió a criticar a Pekín como responsable de la pandemia del coronavirus, el testimonio más contundente contra el gigante asiático fue el de un disidente chino que escapó en 2012 de China con la ayuda de la entonces secretaria de Estado, Hillary Clinton, y que pidió el voto para Trump.
“Estados Unidos debe usar sus valores de libertad, democracia y el Estado de derecho para reunir a una coalición de otras democracias que detengan la agresión de China. El presidente Trump ha sido un líder en este ámbito, y necesitamos que otros países se unan a él en esta lucha”, afirmó Chen Guangcheng,
Su discurso buscaba ayudar a reivindicar la política del actual presidente hacia China, al que ha convertido en su principal adversario internacional, espoleando una tensión que ha aumentado los últimos meses con sanciones económicas y diplomáticas a Pekín.
Al terminar su discurso, Trump y su esposa Melania subieron al escenario para posar junto a Pence y su mujer, Karen, y después bajaron al público para saludar a los militares y posar en fotos con el público, que se agolpó para verles.
La convención concluirá este jueves 27 de agosto, con el esperado discurso de aceptación de Trump de la nominación republicana para las elecciones del 3 de noviembre, en directo desde la Casa Blanca.