El nieto de la reina Isabel II fue enviado a distintas misiones en la provincia de Helmand, al sur de Afganistán, como apoyo a las tropas aliadas, por ello, mostró su apoyo ante la dramática situación que se está viviendo en el país asiático
SurFlorida / ElDiariony
El príncipe Harry ha recibido con consternación, como la opinión pública de todo el mundo, el progresivo, pero implacable regreso de los extremistas talibanes al poder en Afganistán.
Y debido a la relación tan especial que Harry mantiene con el país asiático, donde sirvió dos veces durante los 10 años que formó parte del ejército británico, se ha sentido en la obligación de pronunciarse sobre la tragedia, que ya ha desembocado en una pérdida total de libertades para los ciudadanos del país, especialmente las mujeres.
Hay que recordar, además, que el hijo de Diana de Gales fundó en 2014 una organización solidaria llamada ‘Invictus’ que, al margen de la atención mediática que suele recibir a cuenta de los juegos deportivos que se celebran esporádicamente, también se dedica a asistir de forma sistemática a los veteranos de guerra en todas sus necesidades, tanto fisiológicas y psicológicas.
Eso explica que él haya querido dirigirse directamente a ellos para pedirles que se apoyen los unos a los otros en estos momentos tan duros a nivel político, social y también emocional.
“Lo que está ocurriendo en Afganistán resuena en todas las comunidades internacionales de la red Invictus. Muchas de las naciones participantes y de los competidores de los Juegos Invictus están unidos por la experiencia compartida en el país, tras servir durante muchos años y desde hace dos décadas”, comienza explicando en un comunicado.
“Por eso quiero animar a toda la red Invictus, y a la comunidad militar más amplia, a que se ayuden y se mantengan en contacto para ofrecer todo el apoyo posible”, finalizó.
El duque de Sussex pasó 10 años en el ejército británico y realizó dos giras en la primera línea en Afganistán como controlador aéreo con los Blues and Royals en la provincia de Helmand, y como piloto de helicóptero de ataque Apache. Una experiencia que le marcó profundamente y que le llevó en 2013 a afirmar que incluso había matado a algunos talibanes.
“Si hay gente que trata de hacernos daño, los tenemos que eliminar, supongo. Acabar con una vida para salvar otra. El escuadrón estaba ahí. Todo el mundo hizo una cierta cantidad de disparos”, declaró a la agencia británica Press Association sobre su experiencia militar en Afganistán.
El domingo, 15 de agosto, los talibanes declararon la victoria después de que el presidente afgano Ashraf Ghani huyera del país y su gobierno colapsara. El regreso de los militantes radicales al gobierno llega tras casi 20 años de presencia de una coalición liderada por EE.UU. que derrotó precisamente entonces al Talibán.