2 de mayo de 2024 6:41 PM

El Miami Open: la nostalgia de la última edición en Key Biscayne

El torneo de Miami fue, históricamente, uno de los favoritos de los argentinos: de los jugadores y del público. Fue considerado, durante mucho tiempo, una suerte de quinto Grand Slam. Las playas, el agradable clima en esta época del año y la movida nocturna fueron complementos muy atractivos que hacían del certamen una de las mejores plazas del circuito. Todo eso fue hasta que una batalla legal y cultural restringió un necesario plan de modernización de las instalaciones del Crandon Park Tennis Center y lo puso en jaque. El torneo nació en Delray Beach, pasó a Boca Raton y desde 1987 se disputa en Key Biscayne, pero quedó estancado y expuesto, sobre todo con el fulgurante crecimiento de Indian Wells de la mano del millonario Latty Elison. A partir de 2019, el certamen mixto se mudará a unos 40 minutos en automóvil de su ubicación actual: al Hard Rock Stadium de Miami Gardens.

¿Por qué no pudieron hacer remodelaciones en el sitio actual? La familia original propietaria de los terrenos de Crandon Park, de apellido Matheson, los donaron en la década del ’40 al condado con distintas condiciones, entre otras, que se preservara la naturaleza (es un área con diversas especies de aves y tortugas marinas) y que se lo utilizara con fines públicos. De hecho, si se concurre al Crandon Park durante los meses en los que no se juega el torneo, se pueden alquilar las canchas, inclusive la del estadio central. Estas condiciones no fueron de la mano con el espíritu comercial del torneo y no se permitió la ampliación del court central ni la construcción de un nuevo estadio donde está el Grandstand, el segundo en importancia, aunque de tribunas tubulares. Por todo ello, la ubicación actual ya no resistió. Se evaluó la posibilidad de trasladar la semana a otra ciudad estadounidense (Orlando fue una opción) y también a otro país.

Stephen Ross, propietario de los Dolphins (el equipo que hace de local en el Hard Rock Stadium) y Mark Shapiro, presidente de Endeavor, la empresa dueña del torneo de tenis, el lunes participaron de una suerte de ceremonia de lanzamiento del nuevo escenario, arrojando arena con una pala en el estadio (del acto también participó Serena Williams ). La inversión es de alrededor de US$ 60.000.000 y en la zona de estacionamientos del Hard Rock Stadium comenzó la construcción de 30 canchas permanentes, algunas de ellas con tribunas y otras para entrenamientos. El condado de Miami-Dade estaba muy interesado en que el torneo no se fuera de la ciudad: el impacto económico que genera es de US$ 360 millones por año…

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