23 de diciembre de 2024 12:35 AM

El infinito dolor de Liam Neeson tras la trágica perdida de Natasha Richardson hace 12 años

“No soy bueno sin trabajo y no quería entrar en la depresión”, contó en una oportunidad Liam Neeson. 

Sur Florida / Yahoo

El actor siempre subraya que el cine lo salvó de un espiral autodestructivo luego de la muerte de su esposa, la actriz Natasha Richardson. 

Con quien tenía uno de esos vínculos que pocas veces vemos en la industria del cine: sólido, de perfil bajo, sin escándalos, fuerte ante cada embestida, como los conflictos al inicio de su romance.

Por lo tanto, cuando la actriz falleció, la luz de Neeson se apagó y fue invadido por un dolor infinito que parece notársele en el rostro.

No sucumbió a la depresión, pero siempre reconoce que espera ver entrar a Natasha por la puerta. Toda una postal de una tristeza perenne.

Natasha Richardson y Liam Neeson: un amor prohibido que conoció la felicidad y terminó en tragedia

Este jueves se cumplen 12 años de la muerte de la actriz británica, quien nació en un mundo de artistas. 

Natasha era nieta del director Sir Michael Redgrave y la actriz Rachel Kempson, sobrina de los hermanos actores Corin y Lynn Redgrave.

Hija de la actriz Vanessa Redgrave y del realizador Tony Richardson, y hermana de la también actriz Joely Richardson.

“Como no conocía otra cosa, en ese momento me parecía normal.

Cuando era chica, no me interesaba el trabajo de mis padres, creo que suele pasar que solo te preocupás por tu infancia.

Lo cual es un poco triste, porque en mis 20 falleció mi padre, a quien nunca le pude preguntar nada sobre su trabajo.

Después de su muerte, empecé a ver todos sus films, que en los 60 fueron revolucionarios para el cine británico”. 

Le contó en exclusiva a LA NACION Joely sobre cómo fue crecer con su hermana en una casa rodeada de artistas.

Richardson, junto al elenco de Juego de gemelas
Richardson, junto al elenco de Juego de gemelas

Richardson, junto al elenco de Juego de gemelas

No faltó mucho para que Natasha también se sume al grupo y lo hizo nada menos que de la mano de su padre, en La carga de la brigada ligera, en 1968.

El comienzo de una prolífica carrera que incluyó títulos como la versión cinematográfica de The Handmaid’s Tale. 

La emblemática comedia de los 90 Juego de gemelas, la extraordinaria Una mujer llamada Nell de Michael Apted, donde trabajó con Neeson, y la comedia romántica Sueño de amor. 

Asimismo trabajó con su madre nada menos que un año antes de su muerte en la película Pasión al atardecer de Lajos Koltai -ya lo había hecho previamente en La condesa blanca de James Ivory-, y en la obra teatral Pequeña música nocturna.

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Relacionados