El Carnaval de la Calle Ocho, el festival hispano más grande de Estados Unidos, batió el domingo su quinta marca en el Libro de Récords Guiness con una multicolor bandera de 250 pies de largo y 36 de ancho compuesta por 422 banderas de todos los países del mundo.
Más de 100 voluntarios cargaron la bandera ensamblada en forma del número 1 como símbolo de la unidad. Luego la levantaron durante 276 segundos, en representación del número de países del planeta.
Representantes del Libro de Récord Guiness presentes en Miami para la ocasión certificaron que se trataba de la imagen más grande del mundo hecha con banderas, dijo Lino Fernández, ex presidente del Club Kiwanis de La Pequeña Habana, que organiza el evento.
Fue un reconocimiento extraordinario para celebrar la 35ta. edición del festival, otro hito de una tradición que comenzó como un esfuerzo de un grupo de jóvenes cubanos para dar a conocer su cultura .
La bandera, nombrada “One World” y cosida hace dos semanas, fue desplegada a las 2:15 p.m. entre las avenidas 25 y 24 del suroeste. Para levantarla se usaron 63 postes de 10 pies de altura en el perímetro externo y 25 en el interior.
“La logística fue complicada”, explicó Fernández. “Es una bandera muy pesada. Hay que tomar en cuenta el viento y el río de personas que camina por la Calle Ocho”.
Carlos Othon, ingeniero de Hallandale Beach, se sorprendió al ver el despliegue.
“El collage nos dice que somos un sólo pueblo en el mundo y que la división geográfica la inventó el hombre y en realidad no existe”, afirmó Othon, de 64 años. “Somos todos habitantes de un sólo país: el planeta”.
Con un derroche de sabor, entretenimiento y música, el carnaval atrae anualmente a un millón de visitantes de diversas nacionalidades y etnias. El tejido social de Miami era distinto en 1978. Entonces la comunidad estaba fragmentada y los diferentes grupos étnicos no se conocían, dijo el empresario Leslie Pantín, uno de los fundadores del Club Kiwanis.
El club inició el festival con el nombre Open House 8, una invitación a la comunidad para familiarizarse con las tradiciones de los exiliados cubanos. Se esperaba la asistencia de unas 25,000 personas y llegaron 100,000.
“Pensábamos que había una necesidad de invitar al resto de la comunidad a La Pequeña Habana para que conociera a los cubanos”, recordó Pantín. “Entre los norteamericanos existe la tradición del open house, que es cuando uno invita a sus vecinos a conocer tu casa; de ahí salió el nombre.
Fueron los norteamericanos quienes empezaron a llamarle el paseo o festival de la Calle Ocho. Desde entonces el evento ha logrado varios récords de Guiness, comenzando en 1998 por la conga más grande del mundo, cuando 119,969 personas se unieron a mover las caderas al ritmo de Conga, de Gloria Estefan, quien presidió el desfile.
Luego volverían a realizar otras atrevidas hazañas. En 1990, el festival rompió el récord de la piñata más grande del mundo; en el 2000, el tabaco más largo del mundo, y en el 2008 la mayor cantidad de jugadores de dominó en un mismo lugar: 400 personas que compitieron simultáneamente.
La idea de la bandera “One World” provino de Jencarlos Canela, actor y cantante cubanoamericano de 22 años que este año fue el Rey del Carnaval. El proyecto se realizó con la ayuda del Comité Internacional de Rescate (IRC), organización sin fines de lucro que ayuda a refugiados en cinco continentes.
“Queremos representar un mundo sin fronteras”, dijo Oasis Peña, directora de operaciones del IRC en Miami. “La bandera forma un número uno y así es como queremos ver el mundo”.