5 de octubre de 2024 5:17 AM

El boxeador venezolano Ismael Barroso protagoniza su primera velada en Miami

No es primera vez que Ismael Barroso protagoniza una cartelera en su carrera de boxeador, pero si será la primera vez en Miami. Desde Caracas a Manchester, el venezolano lo ha visto todo en el ring, menos ser estelar en la ciudad que lo ha acogido como su segunda casa.

surflorida/ Por ENH

Todo eso va a cambiar este sábado, cuando Barroso enfrente en La Scala de Brickell al argentino Nestor Hugo Paniagua en una cartelera de M&R Promotions que abre la temporada de pugilismo en la Capital del Sol y contará con una mezcla interesante de talento local y foráneo.

Alguna vez ya peleó por un título del mundo cuando cayó en Inglaterra frente a Anthony Crolla en el 2016, pero Barroso sabe que esa oportunidad podría presentarse muy pronto si sale airoso de este compromiso. Hombre profundamente religioso, asegura que nunca está solo en su esquina, porque una fuerza potente siempre está a su lado.

¿Qué esperas de esta pelea?

“Esta una tremenda oportunidad para iniciar el 2021 de una manera positiva. Esta será una pelea de preparación, para sacudir cualquier polvo y mirar adelante. Pero es una pelea que no tomo a la ligera. Me he preparado como si fuera a un choque por un título mundial’‘.

¿Es difícil mantener el enfoque sabiendo que tu nivel es superior?

“Todo depende de uno. Sin duda mi nivel es superior, pero subestimar al rival te puede quitar por delante esas mejores oportunidades que pudieran venir. Así que antes de pensar en grande para el resto de la temporada, lo vital es comenzarla este 30 de enero de la manera correcta’‘.

¿Cuáles serían esas oportunidades?

“Mi mentalidad es combatir con los mejores. Yo estoy dispuesto a subir contra el que sea y todos saben que mi estilo es aguerrido y que siempre doy buen combate. Mi empresa trabaja fuertemente para asegurar esos combates y yo solo espero que me llamen y me den un nombre y una fecha’‘.

Fuiste retador mundial, con altas y bajas, ¿cómo ves tu carrera ahora?

“Muy bien. Siempre ando con con Dios y mantengo la mente positiva. He sufrido tropiezos, en ocasiones la vida me puso cosas difíciles en el camino, pero siempre he buscado avanzar a toda costa, a pedir a los rivales más duros y a no tenerle miedo a nada’‘.

En el 2020 no subiste al ring, ¿no te desesperaste en la pandemia?

“No ha sido fácil esperar tanto tiempo, pero fue algo que escapaba de mis manos. Tengo la fortaleza de mi fe en Dios y la fortaleza de mi equipo de trabajo que siempre ha estado pendiente de que no me falte nada. Me han faltado peleas, pero no nada para vivir’‘.

Eres como un segundo entrenador en gimnasio.

“Mi entrenador Moro Fernández y yo llevamos muchos anos juntos. El no solo es mi entrenador, también es mi amigo, un padre, que ha estado en las buenas y en las malas. Hemos pasado por lo bueno y por la malo, y vamos a continuar juntos para lo que venga’‘.

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Relacionados