El gobierno estadounidense no renovará la orden de moratoria nacional contra desalojos y ejecuciones hipotecarias, argumentando que quedó sin opciones luego de que la Corte Suprema indicó que solamente podía ser extendida hasta el final de julio.
Sur Florida / diariolasamericas
Florida, uno de los estados más impactados por la pandemia de coronavirus y con miles de casos pendientes en las cortes del estado, se enfrenta ahora a una compleja situación que comienza en agosto con los desalojos y las ejecuciones hipotecarias.
En una declaración el jueves, la Casa Blanca dijo que el presidente Joe Biden hubiera preferido mantener la moratoria federal debido a la diseminación de la variante delta del coronavirus. Biden llamó al Congreso “a extender la moratoria de desalojos para proteger a los inquilinos vulnerables y sus familias sin demora”.
La moratoria fue decretada por el expresidente Donald Trump en marzo del 2020 ante el recrudecimiento de la pandemia en EEUU y fue extendida en tres ocasiones (cada una de ellas durante tres meses). Luego la administración Biden lo hizo en dos ocasiones más, la última solo hasta el 31 de julio, como anticipó el máximo tribunal del país.
Para finales de marzo, 6,4 millones de hogares estadounidenses estaban retrasados en el pago de alquileres, de acuerdo con el Departamento de Viviendas. Para el 5 de julio, unos 3,6 millones de personas en el país dijeron que enfrentaban desalojo en los próximos dos meses, de acuerdo con un sondeo de la Oficina del Censo.