El Gobierno de EEUU está preparando una demanda antimonopolio conta la red social Facebook, según han informado esta noche tanto The Wall Street Journal como Bloomberg. La Comisión Federal de Comercio, una agencia gubernamental encargada de velar por los derechos de los consumidores y por la libre competencia, ha estado investigando a la compañía durante más de un año las prácticas de la red social y, aunque todavía no ha tomado una decisión final, podría formalizar la denuncia antes de fin de año.
Sur Florida / El País
La eventual denuncia sería un paso más en la campaña de la administración estadounidense contra las posiciones de dominio de las grandes tecnológicas; de hecho se espera una demanda contra Google en cuestión de semanas. El consejero delegado y cofundador de la empresa, Mark Zuckerberg, ha tenido que testificar y responder a preguntas de la Comisión en el marco de la investigación, de acuerdo a The Wall Street Journal, que cita a fuentes conocedoras del asunto.
Si se demuestra que Facebook eliminó a su competencia, la Comisión Federal del Comercio podría restringir su forma de operar o incluso ordenar que se separe en diferentes entidades. Sin embargo, la Comisión no puede imponer de manera unilateral ningún cambio, ya que primero tendría que demostrar ante la justicia que la red social ha violado las leyes antimonopolio y que esos cambios en su estructura con absolutamente necesarios.
La investigación arrancó el año pasado, y se centra en si las compras de empresas como Instagram o Whatsapp, suponen una violación de las normas antimonopolio. Estas operaciones han impedido que rivales más pequeños compitan contra Facebook, a pesar de que en su día fueron operaciones aprobadas. Zuckerberg fue interrogado sobre este extremo durante una audiencia en el Congreso de Estados Unidos.
Durante el año pasado, Facebook se vio implicada en numerosos escándalos relativos a su gestión de la privacidad, siendo el más sonado de ellos el de la consultora británica Cambridge Analytica, que utilizó una aplicación para recopilar millones de datos de internautas de la plataforma sin su consentimiento con fines políticos.
En marzo del pasado año, la Comisión Federal de Comercio confirmó que investigaba a la firma tecnológica tras la filtración de datos de unos 50 millones de usuarios a Cambridge Analytica y anunció que usaría “todas sus herramientas” para proteger la privacidad de los consumidores, incluidas “acciones coercitivas”.