Donald Trump insiste en su defensa de la hidroxicloroquina. El presidente Donald Trump hizo el martes, otra vez, una firme defensa del uso desaprobado de un medicamento contra la malaria para tratar el coronavirus, horas después de que las empresas de las redes sociales retiraran videos que alentaban su consumo por considerarlos información equivocada posiblemente perjudicial.
Sue Florida / Telemundo 31
El presidente, en un marcado cambio de la postura más mesurada que ha adoptado frente al virus en los últimos días, recurrió a Twitter para promover la hidroxicloroquina como tratamiento contra el COVID-19, la enfermedad causada por el virus, y para intensificar sus críticas al doctor Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas de la nación.
En una sesión informativa en la Casa Blanca, Trump defendió su decisión de darle proyección a un video viral de un grupo de doctores que promovían el lunes el uso del medicamento, aun cuando su propio gobierno canceló la autorización de emergencia para utilizarlo contra el coronavirus.
“Creo que son doctores muy respetados”, dijo Trump, agregando que ellos creían en el medicamento.
“Había una mujer que fue espectacular en sus declaraciones al respecto”. Los médicos integrantes de un grupo llamado America’s Frontline Doctors, participó en un evento organizado por el grupo Tea Party Patriots Action, que ha aportado recursos a un comité de acción política pro-Trump.
Estudios científicos han mostrado que la hidroxicloroquina puede causar más daño que bien cuando se le utiliza para tratar los síntomas de COVID-19.
Trump, su hijo Donald Trump Jr., y otros compartieron el video del evento en Facebook y Twitter, obligando a ambas plataformas a intervenir y retirar el contenido como parte de una enérgica campaña para mantener las redes sociales libres de información posiblemente perjudicial sobre el virus, aunque no antes de que más de 17 millones de personas hubieran visto una versión del video que circuló en redes.
La decisión de retirar los videos suscitó reclamos de “censura” de parte de los conservadores y Simone Gold, una de los doctores, tuiteó que “siempre hay puntos de vista opuestos en medicina”.
“Las opciones de tratamiento para el COVID-19 deben ser debatidas y conversadas entre nuestros colegas en el campo médico”, escribió. “Sin embargo, ellos nunca deben ser censurados ni callados”.
Otros subrayaron las diferencias entre la opinión médica y los estudios científicos revisados por pares.
En muchos estudios de alta calidad no se encontró evidencia de que la hidroxicloroquina, cuando se le utiliza con o sin el antibiótico azitromicina, como Trump lo ha dicho muchas veces, ayuda a tratar la infección de coronavirus o impedir una enfermedad grave después del contagio.
Entre los estudios figuran algunos encargados por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, la Organización Mundial de la Salud y universidades en Estados Unidos y el mundo.
Debido a la falta de beneficio y los riesgos de efectos secundarios graves como arritmias cardiacas, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) revocó en fecha reciente su breve autorización para el uso de emergencia del medicamento a fin de atender casos de COVID-19.
Las directrices de tratamiento emitidas por los INS también recomiendan específicamente no utilizar la hidroxicloroquina, salvo en estudios formales.
Además de compartir el video, Trump retuiteó varios mensajes que atacaban la credibilidad de Fauci, uno de los miembros prominentes del equipo especial de la Casa Blanca contra el coronavirus.