Los Miami Dolphins se han estado preparando incansablemente para comenzar su primer juego en casa de la temporada 2020 de la NFL.
Sur Florida / local 10
Si bien algunos fanáticos podrán ingresar al Hard Rock Stadium para el partido del domingo contra los Buffalo Bills, los oficiales están limitando la capacidad a solo 13,000 personas. Eso está muy lejos de los más de 60.000 que normalmente puede albergar el estadio.
Uno de los primeros cambios que los fanáticos notarán es una nueva entrada sin contacto y un proceso de control de seguridad en las puertas principales del estadio.
Además de agregar más puntos de entrada y caminar a través de detectores de metales, los funcionarios también les darán a los fanáticos un boleto móvil con una hora específica para llegar, horarios de entrada asombrosos para asegurarse de que no haya aglomeraciones.
Una vez dentro del estadio, los aficionados se sentarán en grupos socialmente distanciados.
Eso se suma al aumento de los procedimientos de limpieza y saneamiento y una experiencia de concesión sin efectivo, donde todos los pedidos se realizarán y pagarán a través de una aplicación móvil en línea.
En la suite Leven y dentro de los palcos de lujo, se acabaron los bufés; en cambio, los fanáticos ahora tendrán que agarrar paquetes de bocadillos envueltos individualmente.
Los equipos también agregaron un nuevo sistema de filtración de aire de grado hospitalario y el requisito de que todos los fanáticos usen sus máscaras a menos que coman o beban activamente.
