Cuba anunció este jueves que abriría tiendas en divisas para vender artículos de higiene y alimentos, así como la eliminación del gravamen del 10 por ciento con que el gobierno penalizaba al dólar estadounidense a partir del próximo lunes.
Sur Florida/El Nuevo Herald
Las nuevas medidas buscan afrontar la crisis económica que asola al país debido a deficiencias internas, la caída en los subsidios venezolanos y las sanciones de Estados Unidos.
El anuncio fue hecho en cadena obligatoria de televisión nacional, donde se transmitió además un fragmento de la reunión de esta mañana del Consejo de Ministros en la que el gobernante Miguel Díaz-Canel anunció un cronograma de reformas.
Díaz-Canel dijo que el gobierno no puede seguir “haciendo lo mismo” en relación al modelo económico del país porque “no está dando resultados”.
El gobernante agregó que la unificación monetaria en Cuba se hará “en el menor tiempo posible”, sin dar más detalles. En Cuba circulan dos monedas, el peso cubano convertible, con una paridad ficticia con el dólar y la moneda nacional, con un valor 24 veces menor.
Visiblemente molesto con los medios que adelantaron la noticia, el gobernante confirmó que el país se prepara para abrir tiendas que vendan alimentos y productos de aseo en dólares.
“Nosotros vamos a mantener a un costo tremendo un nivel de ventas en las tiendas en CUC”, dijo, criticando a los medios independientes que cuestionaron las ventas en dólares.
Díaz-Canel aseguró que “vivimos el derrumbe definitivo de los paradigmas del neoliberalismo”, y elogió el libro del ex asesor de seguridad nacional John Bolton, crítico con la administración de Donald Trump.
El gobernante dijo que “el bloqueo” y la “persecución financiera” es el responsable de la escasez de productos de primera necesidad en la isla.
UNA “SITUACIÓN EXCEPCIONAL” EN LA ECONOMÍA
El ministro de economía, Alejandro Gil, explicó que el país lleva “cuatro meses sin turismo”, con un incremento del déficit del presupuesto del Estado.
Entre las medidas presentadas por Gil está la eliminación del gravamen que desde 2004 el Estado imponía a las transacciones en dólares.
“Esta es una medida que beneficia a todos los cubanos de dentro y fuera del país, (…) que se toma en medio del recrudecimiento del ‘bloqueo’ (embargo) de Estados Unidos y permite darle más capacidad de compra al dólar”, explicó el ministro.
Gil dijo que las transacciones con dólares en las nuevas tiendas en divisas no sufrirán la pérdida de un 10% en el cambio, como ocurría hasta ahora.
A la falta de divisas por el cierre al turismo se une la caída de las exportaciones tradicionales del país, dijo el ministro.
“Hay un arreciamiento de las medidas de bloqueo [embargo]” por parte de Estados Unidos, agregó.
Gil aseguró que el país continuará con una economía centralizada e intentará “defender la producción nacional” y “desterrar la mentalidad importadora”.
Cuba importa cerca del 80 por ciento de los alimentos que consume.
El ministro dijo además que mantendrán regulado el mercado pero a través de mecanismos secundarios y no utilizando medidas coercitivas. Gil anunció que las empresas estatales tendrán mayor capacidad de gestión y se incentivará la competitividad, el ahorro y la eficiencia.
La prioridad para el gobierno durante los próximos meses será la producción nacional de alimentos, dijo Gil, que acusó a la actual forma de gestión de “monopólica”.
También el gobernante Miguel Díaz-Canel se refirió a la producción de alimentos como “prioridad” del Estado. “Tenemos que aprender a vivir con menos importaciones y con más exportaciones, promoviendo la producción nacional para satisfacer la demanda interna”, dijo.
El ministro Gil, por su parte, anunció que se trabajará en la creación de micros, pequeñas y medianas empresas estatales, privadas y mixtas.
“No es que estén mañana”, aclaró. Pero se comprometió con que el gobierno “trabajará” para regular estos nuevos entes económicos.
Gil dijo que el gobierno está elaborando normas para permitir a las pequeñas empresas privadas exportar, siempre a través de empresas estatales.
También se refirió a una “ampliación” del trabajo privado y la potenciación de “cooperativas no agropecuarias”, sin ahondar en detalles.
Gil anunció que entregarían a través de la cartilla de racionamiento dos libras de arroz adicionales por consumidor a 4 pesos durante los meses de julio y agosto.
También aseguró que como parte “del esfuerzo” del gobierno entregarían a cada cubano 6 onzas de frijoles adicionales a las 10 onzas que el Estado provee.
