Cuando la Ley CARES se aprobó, dentro de varias reglas en las que destacó el cheque de estímulo de $1,200 dólares, se permitió que las personas pudieran retirar fondos de sus cuentas de retiro por hasta $100,000 dólares, sin multas federales. Con las altas tasas de desempleo provocadas por el coronavirus, para muchas personas fue un recurso al que tuvieron que recurrier, sin embargo, ahora se ven envueltos en el dilema de cómo poder recuperar ese dinero, cuando la pandemia continúa activa en Estados Unidos y parece que las cosas mejoran lentamente.
Sur Florida/Solo Dinero
Aquí te dejamos algunos consejos que puedes llevar a cabo lo más pronto posible para que puedas mejorar tus ahorros para la jubilación si estuviste desempleado durante 2020 y estás recuperándote este año.
1. Evalúa tu situación actual
Si tomaste dinero de tu cuenta 401(k) o IRA, no seas tan cruel contigo mismo. Sin importar la cantidad que hayas tomado ni la legislatura del año pasado, retirar dinero de tu jubilación siempre es un castigo hacia el futuro.
Ahora que estamos en 2021 y si encontraste empleo o una forma de ingreso regular, entonces es momento de recapitular lo que retiraste y plantearte objetivos. No importa lo que tienes o perdiste sino lo que quieres. Evalúa cómo están tus finanzas en estos momentos, cómo están tus gastos y cuánto te puedes permitir abonar a tu jubilación. Si puedes sumarle un extra a lo que solías abonar, será lo mejor. Lo importante es que te plantees una meta y traces el camino.
2. Crea un plan
Como lo acabamos de mencionar, después de tener claro el objetivo, genera la ruta para llegar a él.
Crea un plan mensual de reconstrucción de tu fondo de jubilación. Si antes aportabas $100 dólares, busca aportar de menos $105 o $110 dólares. Así no sólo regresas a la senda que mantenías antes de la crisis, sino que además le agregas más valor a tus cuentas en busca de recuperar lo perdido. Si puedes duplicar tus aportaciones, estupendo.
Recuerda que a pesar de que la Ley CARES te protegió de la multa del 10% por retiro anticipado, aún adeudarás impuestos sobre tus ingresos que se cuentan cuando retiraste, pero puedes recuperar esos impuestos pagados si recuperas tu distribución dentro de los tres años. Por eso mismo haz cuentas y si puedes mantener ese plan mensualmente hasta por 36 meses, entonces garantizarás el éxito.
“Pagar ese préstamo antes, suponiendo que puedas hacerlo cómodamente, disminuirá el costo del préstamo y pondrá tu dinero en el mercado trabajando para ti antes, una situación en la que todos ganan”, recomendó para Nerdwallet Lauren Anastasio, planificadora financiera certificada de SoFi en San Francisco, California.
3. Revisa tu cartera
Quitar dinero de tus cuentas de jubilación no significa que hayas retirado todos tus fondos. Menos si hablamos de que puedas tener otras cuentas de inversión.
La rápida liquidación del mercado en marzo de 2020 provocó niveles de negociación récord con la mayoría de los inversores, negociando con acciones e inversiones de renta fija, como bonos o fondos del mercado monetario. Desde entonces no se ha visto que los inversionistas regresen a las acciones de renta fija, lo que significaría que muchos de ellos han perdido dinero porque no vieron recuperación del mercado. En pocas palabras, invertir para la jubilación es más redituable porque tiene una visión a largo plazo y se evitan reacciones instintivas.
Independientemente de si realizaste operaciones durante este tiempo o no, los asesores dicen que volver a visitar tu cartera es un movimiento inteligente siempre que haya una volatilidad significativa en el mercado porque es probable que la asignación de tu cartera haya cambiado. Es importante asegurarse de que tu asignación de activos siga siendo adecuada para tus objetivos, tolerancia al riesgo y horizonte de tiempo o el período de tiempo que tienes que invertir antes de llegar a la jubilación, y reequilibrar según sea necesario, dicen los asesores.
Un punto a favor desde la perspectiva de Anastasio es que aquellos que permanecieron en sus inversiones se beneficiaron de un repunte rápido. “Incluso si dejaste de contribuir a tu plan, tomaste una distribución o un préstamo, la buena noticia es que el saldo que habías invertido probablemente valga más hoy que hace un año“, asegura. “Así que tu dinero seguía funcionando para ti, incluso si sientes que tienes que ponerte al día”.
4. Ten un plan de respaldo
Si sufriste del desempleo y recurriste a una cuenta de jubilación, pensamos que debió ser como último recurso antes de agotar otras posibilidades. Aunque aún no acaba la pandemia debemos considerar aprender a tener un plan de respaldo para combatir las necesidades básicas en futuras crisis sin necesidad de retirar fondos destinados a tu jubilación. Hacerlo te salva del presente, pero tu yo del futuro te lo va a reprochar.
La creación de un fondo de emergencia en cualquier circunstancia, pero aún más cuando la fortuna brilla, es primordial. Si bien muchos expertos señalan que debas ahorrar de tres a seis meses de gastos normales como mínimo, puedes empezar con metas pequeñas como lograr $500 dólares para urgencias. Cuando llegues a esa meta, auméntala, así hasta lograr cubrir los meses aconsejados o más. Un fondo de emergencia no debería tener un límite preestablecido.
