Cientos de barcos fantasmas norcoreanos llegan a las costas de Japón. Japón culpa a China después de que cientos de “barcos fantasmas” aparecieran en sus costas, incluyendo algunos que contenían esqueletos.
Sur Florida / The Sun
Casi 600 de los barcos fantasmas han sido encontrados en los últimos cinco años, y 150 sólo en el último año.
Uno de los descubrimientos más sombríos se produjo en diciembre de 2019 cuando los funcionarios encontraron las cabezas de dos personas y los cuerpos parcialmente esqueléticos de cinco, mientras un barco de madera flotaba en la isla japonesa de Sado.
Una nueva investigación de NBC News y Global Fishing Watch (GFW) ha compilado los datos y recogido anécdotas sorprendentes.
Esto incluye la historia de un guardacostas japonés que dice que más de 50 norcoreanos se han bañado en las playas en los últimos dos años.
La razón de los “barcos fantasmas” es que China ha enviado una armada previamente invisible de barcos industriales para pescar ilegalmente en aguas norcoreanas, afirman los investigadores.
Esto hizo que pescadores norcoreanos desesperados arriesgaran sus vidas yendo más lejos en el mar en barcos inseguros, que se vieron abrumados por las duras olas y fueron arrastrados.
Se cree que el régimen de Kim Jong-un ejerció más presión sobre los pescadores en medio de la escasez de alimentos.
De hecho, tantos pescadores han desaparecido en el mar que algunas ciudades portuarias se llaman “pueblos de viudas”.
Al menos 50 supervivientes han sido rescatados y entrevistados en los últimos siete años por las autoridades japonesas, pero al parecer se han negado a responder a la mayoría de las preguntas y han exigido ser devueltos al secreto país de Corea del Norte.
Las ‘flotas oscuras’ de los barcos chinos no difunden públicamente su ubicación ni aparecen en los sistemas públicos de vigilancia, según el Guardian.
Durante mucho tiempo, los barcos fantasmas que contenían cadáveres o esqueletos en los caladeros del Mar de Japón fueron un misterio.
Originalmente se creía que el cambio climático había obligado a los calamares a abandonar su ubicación natural, obligando a los norcoreanos a ir más lejos en el mar y quedarse varados hasta que murieran de deshidratación o inanición.
Muchos barcos que llegaron a la costa no tenían a nadie a bordo, lo que hizo que Japón sospechara que llevaban espías o incluso personas que viajaban allí para propagar una enfermedad.
GFW es una organización sin fines de lucro que hace campaña por la transparencia en la industria pesquera.
Dijeron que más de 900 barcos chinos pescaron ilegalmente en la región en 2017, y 700 en 2018.
El grupo también cree que es probable que China haya violado las sanciones de la ONU que prohíben la pesca extranjera en las aguas territoriales de Corea del Norte.
