El presidente Joe Biden firmó el jueves su proyecto de ley de estímulo por valor de 1,9 billones de dólares, conmemorando el primer aniversario del cierre de Estados Unidos por la pandemia del coronavirus con una medida destinada a aliviar a los estadounidenses e impulsar la economía.
Sur Florida / Reuters
La Cámara de Representantes, liderada por los demócratas, aprobó el final de la medida en el Congreso, otorgando al presidente una importante victoria en los primeros meses de su mandato.
“Esta legislación histórica trata de reconstruir la columna vertebral de este país”, dijo Biden antes de firmar.
Biden firmó la medida antes de un discurso para anunciar el aniversario del bloqueo, instar a la vigilancia mientras la pandemia hace estragos y ofrecer esperanza en medio de un creciente número de personas vacunadas.
La firma de la legislación por parte de Biden, llamada Plan de Rescate Americano, había sido programada inicialmente para el viernes, pero el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Ron Klain, dijo que se adelantó después de que llegara a la Casa Blanca el miércoles por la noche.
“Queremos avanzar lo más rápido posible”, publicó Klain en Twitter. Una celebración con los líderes del Congreso todavía tendría lugar el viernes, dijo.
El paquete prevé 400.000 millones de dólares para pagos directos a la mayoría de los estadounidenses, 350.000 millones de dólares en ayudas a los gobiernos estatales y locales, una ampliación del crédito fiscal para niños y un aumento de la financiación para la distribución de la vacuna COVID-19.
Biden, que hizo campaña con la promesa de frenar la pandemia con más eficacia que su predecesor republicano Donald Trump, ha dicho a los estadounidenses desde su toma de posesión en enero que se avecinaban más muertes y dolor por la COVID-19.
Biden está transmitiendo nuevas esperanzas
Con la población vacunada aumentando lentamente, Biden está transmitiendo nuevas esperanzas, incluso mientras insta a la gente a seguir siendo cautelosa para evitar nuevos brotes.
Biden y sus principales ayudantes están planeando una gira por todo el país para vender a los estadounidenses los beneficios de la ley de ayuda a la pandemia, incluyendo Pensilvania el próximo martes y Atlanta el 19 de marzo.
Aproximadamente 530.000 personas han muerto a causa de la COVID-19 en Estados Unidos, y alrededor del 10% de los estadounidenses se han vacunado completamente.
Biden dijo el miércoles que utilizaría su discurso de las 8 p.m. para hablar de “lo que hemos pasado como nación este último año” y exponer la siguiente fase de la respuesta del gobierno al COVID-19.
Se espera que el presidente advierta a los estadounidenses que, al igual que la gente de todo el mundo, están cansados de las restricciones de la pandemia.
Biden ha instado a seguir usando máscaras, a distanciarse socialmente y a mantener una buena higiene, y ha desaconsejado que las ciudades y los estados flexibilicen sus directrices sobre las grandes reuniones, incluso cuando más localidades relajan las restricciones.
Trump restó importancia a la crisis en sus primeras etapas y evitó el uso de máscaras, al tiempo que predijo repetidamente que el virus desaparecería pronto, incluso cuando su administración presionó para acelerar el desarrollo de la vacuna.
El expresidente y su esposa Melania Trump no aparecieron en un anuncio de servicio público publicado el jueves en el que se animaba a vacunarse contra el COVID-19 y en el que aparecían todos los demás expresidentes estadounidenses vivos y sus cónyuges.
