Aumenta el número de viajeros aéreos en EEUU.
Sur Florida / Diario las Américas
Estados Unidos estableció otro récord en el número de viajeros aéreos desde que comenzó la pandemia de coronavirus, aunque el número de pasajeros se mantiene muy por debajo de los niveles de 2019.
Casi 1,67 millones de personas pasaron por los puntos de control de los aeropuertos estadounidenses el domingo, según la Administración de Seguridad del Transporte (TSA, por sus siglas en inglés). Ese fue el número más alto desde el 12 de marzo del año pasado, cuando los viajes aéreos comenzaron a desplomarse. Sin embargo, la cifra es 35% menor si se compara con el mismo domingo de 2019.
Las aerolíneas comenzaron a ver un aumento en las reservas a mediados de febrero, y al menos a 1 millón de personas han pasado todos los días por los puntos de revisión en los aeropuertos desde el 11 de marzo. Los destinos de vacaciones han sido los más populares, mientras que los viajes de negocios —que son más rentables para las aerolíneas— siguen muy reducidos.
Las restricciones gubernamentales debido al coronavirus también están limitando drásticamente los viajes internacionales, otra pieza lucrativa para las aerolíneas.
En una carta el lunes, casi 50 grupos del sector en Estados Unidos y Gran Bretaña instaron al presidente Joe Biden y al primer ministro británico Boris Johnson a levantar las restricciones a los viajes entre los dos países.
Los ejecutivos de las aerolíneas son cautelosamente optimistas sobre los viajes de verano a medida que más estadounidenses se vacunan contra el COVID-19. Las autoridades de salud de Estados Unidos han dicho que es seguro para las personas vacunadas viajar dentro del país aunque por el momento desaconsejan viajar al extranjero.
La semana pasada, la TSA extendió el requisito para que los pasajeros de las aerolíneas usen cubrebocas. Esa regla iba expirar el 11 de mayo, pero la agencia la extendió hasta mediados de septiembre.
Las aerolíneas ya también están ocupando más asientos. El fin de semana, Delta Air Lines comenzó a utilizar los asientos del medio, los cuales antes dejaba vacíos como medida de precaución por el COVID-19.