El suburbio de Bellevue, en Seattle, pronto podría convertirse en el “HQ3” no oficial de Amazon. El gigante tecnológico anunció el viernes que planea expandir su presencia laboral en Bellevue, con oficinas que albergarán a un total de 25,000 empleados en los próximos años, informó el Seattle Times, de acuerdo con una nota de Fox Business.
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Esa es la misma cantidad de empleados prometidos para Arlington, Virginia, para 2030. La ciudad del área de Washington DC ganó el sorteo HQ2 de Amazon en 2018 al ofrecer $573 millones en subsidios en efectivo e incentivos fiscales. Amazon, a cambio, se comprometió a generar 25,000 nuevos puestos de trabajo que pagarán en promedio 150.000 dólares al año.
Bellevue, mientras tanto, no ha proporcionado exenciones fiscales ni incentivos financieros para atraer a Amazon.
Desde 2016, la compañía ha alquilado espacio en el elegante suburbio de Eastside, a unas 10 millas del centro de Seattle, al otro lado del lago Washington. Amazon ahora tiene a unos 3,000 trabajadores allí y ha aumentado su presencia de manera constante en el robusto corredor del centro de Bellevue, que pronto se conectará con una estación de tren ligero.
El último anuncio detalla el plan de Amazon para el suburbio Eastside incluirá el arrendamiento de dos millones de pies cuadrados en dos torres que están en construcción. La compañía también busca un permiso para tener un segundo rascacielos propio, informa el Seattle Times.
John Schoettler, vicepresidente global de bienes raíces e instalaciones de Amazon, calificó a Bellevue como una “comunidad amigable para los negocios con excelentes comodidades, una alta calidad de vida y una fantástica reserva de talentos”.
La presencia principal de Amazon seguirá cerca del centro de Seattle, donde tienen a unos 55,000 empleados en una combinación de edificios propios y arrendados. La compañía dijo que no tiene nuevos proyectos planeados para Seattle y no comentaría sobre su futura contratación en la ciudad.
Amazon aún tiene que comentar públicamente sobre el impuesto sobre la nómina del 1.4% recientemente aprobado por Seattle sobre los salarios de los empleados que ganan $150,000 dólares o más, pero la Asociación del Centro de Seattle, de la cual Amazon es miembro, se ha opuesto al nuevo impuesto, con el argumento de que provocará a las empresas a dejar la ciudad.
Se espera que el impuesto, que entrará en vigencia el próximo año, recaude más de $200 millones de dólares por año para servicios para personas sin hogar. Es la respuesta de la ciudad a la pandemia de coronavirus, entre otros problemas.
Desde que se mudó y transformó rápidamente Seattle, la compañía ha promocionado con orgullo su ubicación como un modelo único que atrae a una fuerza laboral joven y amante de la ciudad. Eso contrastaba con la construcción habitual de la sede de una empresa de tecnología suburbana.
La última expansión al centro de Bellevue es una combinación de los dos modelos de campus y acerca a Amazon a la ubicación de Microsoft, en Redmond. También es un regreso a casa para el fundador y director ejecutivo de Amazon, Jeff Bezos, quien inició su negocio de libros por correo hace 26 años en un garaje de Bellevue.
