El Gobierno de EE.UU. alerta que habrá retrasos en los principales aeropuertos del país si entran en vigor a partir del 1 de marzo, los recortes automáticos del gasto público previstos para enfrentar el déficit.
Esos recortes van a tener “un impacto real” en el tráfico aéreo, advirtió en una comparecencia de prensa en la Casa Blanca el secretario de Transporte de EE.UU., Ray LaHood.
Si esos recortes entran en vigor, el Departamento de Transporte tendrá que renunciar a unos 1.000 millones de dólares de su presupuesto, de los cuales unos 600 millones corresponden a la Administración Federal de Aviación (FAA, en inglés).
Así, “vuelos desde y hacia grandes ciudades como Nueva York, Chicago, San Francisco y otras podrían experimentar retrasos de hasta 90 minutos durante las horas punta porque tendremos menos controladores”, explicó LaHood.
Según el secretario de Transporte, además se está evaluando la posibilidad de cerrar un centenar de torres de control del tráfico aéreo en aeropuertos medianos y pequeños de todo el país si los cortes presupuestarios se aplican.
LaHood calificó de “calamidad” para el tráfico aéreo la entrada en vigor de esos recortes.
Por una decisión del Congreso adoptada en 2011, sin un acuerdo sobre la reducción del abultado déficit público entrarán en vigor el 1 de marzo recortes automáticos del gasto por valor de más de 85.000 millones de dólares, la mayoría en el presupuesto destinado a Defensa.
El propósito del presidente de EE.UU., Barack Obama, es que el Congreso apruebe un plan de corto plazo que combine reducciones de gasto y aumento de ingresos fiscales para evitar esos recortes, que en principio estaban previstos para primeros de año y quedaron aplazados a marzo.
“Esos recortes no son inteligentes, no son justos, y dañarán a nuestra economía”, insistió Obama el pasado martes en la Casa Blanca al urgir de nuevo al Congreso a que llegue a un acuerdo para evitarlos.
El presidente estuvo acompañado de trabajadores de los servicios de emergencias del Gobierno federal, a quienes puso de ejemplo junto a otros como profesores, agentes del FBI y controladores del tráfico aéreo que podrían perder sus empleos debido a los recortes.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, indicó en su rueda de prensa diaria que Obama viajará el próximo martes a Newport News (Virginia) para enfatizar la necesidad de evitar esos recortes.
Obama ha hablado esta semana por teléfono con el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, para urgir a actuar al Congreso, que está de receso hasta el próximo lunes por las vacaciones de invierno.
Los demócratas en el Senado presentaron un plan la semana pasada para evitar esos recortes que se enfrenta a una fuerte oposición de los republicanos, los cuales rechazan que el aumento de los ingresos del Gobierno provenga de incrementar los impuestos a los ciudadanos más ricos y a las grandes corporaciones. (EFE)