Alejandro Sanz y su novia, la artista plástica cubana Rachel Valdés, fueron el centro de las miradas al desfilar en la alfombra roja del Festival de Cine de San Sebastián, donde asistieron al estreno del filme El verano que vivimos, para que el cantante español ha compuesto el tema principal.
Sur Florida/El Nuevo Herald
La pareja ya cumplió un año de relación, y se muestran más juntos en público desde que el cantante llegó a un acuerdo de divorcio el 9 de septiembre con Raquel Perera, quien fue además su mánager durante más de una década.
Para la prensa española, que recogió la participación del cantante y Valdés en el festival, este es un momento crucial de la vida de la pareja, que estuvo acompañada por la hija del cantante, Manuela.
Combinados los tres, Rachel llevó un vestido blanco de tela fluida y apliques de pedrería en el torso, diseño de Alberta Ferretti, y Manuela uno ajustado de líneas curvas en blanco y negro. Sanz iba de traje negro, incluyendo la máscara.
La primera manifestación pública de amor hacia su novia, la hizo Sanz el año pasado, en la ceremonia de los Grammy Latinos, al besar a Valdés cuando iba a recoger el premio como mejor grabación del año, por Mi persona favorita.
SANZ DEFENDIÓ A SU NOVIA DE ATAQUES EN LAS REDES
La semana pasada varios medios de prensa de España recogieron unas bonitas frases del cantante a Valdés, defendiéndola de unos comentarios críticos que recibió en Instagram.
Sanz invitaba a Valdés a “crear” y concentrarse en “su obra, que engrandece a Cuba y el resto del mundo”.
“Tú a lo tuyo amor, a crear, a creer… lo demás es el ruido que acompaña a la belleza que molesta porque se sale de la oscuridad… simplemente insignificante”, comenzó diciendo el artista madrileño. “Viva tú y tu obra bella que engrandece Cuba y el resto del mundo. Mírame a los ojos… eso… ya está. Los mediocres chillan, la gente brillante… ssshhhh solo crean. Te amo y te admiro”.
Aunque el comentario crítico ha sido borrado, por la respuesta de Valdés se puede asumir que estaba relacionado con Cuba.
“Solo puedo decir que estás en un error. No sabes absolutamente nada de mi vida como para hablar con tanta certeza ¿Y quién dice que he dejado Cuba?”, respondió Valdés.
La artista suele utilizar su perfil de Instagram para comentar sobre el desarrollo de su obra y alguna que otra felicitación o foto de su hijo pequeño de una relación anterior, Max, de seis años.
Recientemente compartió bocetos de la serie Piscina, que la ocupa ahora. También ha puesto fotos de su estudio en La Habana, y de las instalaciones que mostró en el malecón, entre ellas Happily Ever After, una pared de espejos que exhibió en la Bienal de La Habana, en el 2012.
Valdés, de 30 años, es graduada de la Academia de Arte de San Alejandro y ha expuesto sus instalaciones en Times Square y en los Pirineos.
“Toda la inspiración la busco en la naturaleza, en la observación y en el acto de la contemplación… En dependencia del entorno en el que ubicaré mis obras creo un objeto específico, básicamente figuras geométricas hechas con espejos y cristales”, dijo la artista a el Nuevo Herald en el 2016.
SANZ, SEPARACIÓN Y AMOR
Rachel Valdés, que ha sido discreta sobre su relación con Sanz, le dedicó estas palabras al hacerse oficial el divorcio de Perera: “Qué bonito es enamorarse de un corazón honesto. De un amor que no tiene ganas de ser pasajero. De alguien con quien puedes compartir tus locuras y tus más grandes sueños”, reportaron varios medios. A lo que él respondió: “Yo también te amo”.
El acuerdo de divorcio entre el cantante y Perera, que tuvo lugar en un juzgado de Madrid, incluye el pago de un millón de euros por parte de Sanz, además de 5,000 euros mensuales por cada uno de los hijos que tienen en común, Dylan, de 9 años, y Alma, de seis.
Los hijos de Sanz con Perera se han mudado a Madrid para estar cerca del cantante, quien tiene además de Manuela, con la modelo mexicana Jaydy Michel, a Alexander, de 17 años, con la cantante y diseñadora puertorriqueña Valeria Rivera.
Por ahora Valdés y Sanz residen en Madrid, donde alquilan en La Finca, un vecindario de casas millonarias en Pozuelo de Alarcón, donde han vivido artistas y deportistas famosos como Paz Vega, Cristiano Ronaldo e Iker Casillas.