El alcalde de la Ciudad de Miami, Francis Suárez, aseguró, durante una conferencia de prensa, que está de acuerdo con la suspensión del jefe de la Policía, Art Acevedo.
SurFlorida / Diario Las Americas
«Fue una decisión difícil y marca el comienzo del fin de un lamentable episodio para nuestra ciudad», señaló Suárez sobre la resolución del administrador del municipio floridano, Art Noriega, centro financiero y cultural del condado Miami-Dade.
No obstante, el alcalde no opinó sobre la decisión del administrador Noriega de nombrar a Manny Morales jefe interino de la Policía, mientras, según declaró, “se busque un reemplazo”.
Fuentes del cuerpo administrativo, que optaron por el derecho al anonimato, aseguraron que, durante la reunión previa a la suspensión, el alcalde manifestó su desacuerdo con el nombramiento de Morales y habría optado por Brandon Lanier, quien lleva las riendas de la oficina de Asuntos Internos de la Policía de Miami.
Acorde a los estatutos de la Ciudad de Miami, el administrador, que a su vez reporta al alcalde y a la comisión legislativa municipal, decide quién ocupa la jefatura de la Policía.
«Si bien está claro que el jefe Acevedo tiene las calificaciones y la experiencia para ser un jefe de policía eficaz, también es obvio que su personalidad y estilo de jefatura son incompatibles con la estructura del gobierno de nuestra ciudad», acentuó el alcalde durante la conferencia de prensa, que tuvo lugar a la entrada de su oficina, dentro de la alcaldía, donde se conglomeraron periodistas y camarógrafos que no llevaban mascarillas, aún cuando la pandemia de coronavirus no ha terminado.
Pasar página
“Nuestra tarea es asegurarnos que hay seguridad en las calles y que la calidad de vida de la población prospera. No podemos perder tiempo en otras cosas”, subrayó.
Suárez también mencionó el enfrentamiento en curso que involucra a Acevedo y los comisionados de la ciudad.
«El status quo en el que un administrador de la ciudad está en guerra con oficiales electos es simplemente insostenible e insostenible», añadió.
«Esta situación fue imprevisible, y aunque el jefe Acevedo terminó por no encajar bien en nuestra ciudad, ciertamente le deseo a él ya su familia la mejor de las suertes», sostuvo.
Suárez recordó que Acevedo tiene derecho a una audiencia ante los comisionados para exponer su caso, y que dicha reunión podría realizarse el viernes, después de que fuera pautada para el miércoles y el ahora exjefe de Policía pidiera más tiempo.
«No se trata de culpar. Y creo que todos los funcionarios electos tenían la expectativa y la esperanza de que esto saliera bien”, reflexionó.
De esta manera, Suárez, que hace apenas seis meses comparó el reclutamiento de Acevedo “como obtener a un Tom Brady or Michael Jordan de los jefes de policías”, argumentó “creo que cada vez que se contrata a alguien, y no hay duda de que lo contrataron con tremendas calificaciones, fue presidente del Major Cities Chiefs Association, también jefe de dos grandes departamentos policiales, por lo que fue contratado con un alto nivel de expectativa y, lamentablemente, no todas las contrataciones salen bien», concluyó Suárez.
Sobre la ausencia del alcalde en público para abordar el asunto de Acevedo y contestar preguntas a la prensa sobre el caso, Suárez alegó que “hay veces que hay que ser discreto, sobre todo cuando hay situaciones como estas, que plantean alegaciones de ilegalidades y corrupción”.
Luego acentuó “yo no soy fiscal ni investigador y no debo opinar sobre esas alegaciones”.
Ésta no es la primera vez que Miami protagoniza un altercado entre alcaldía, poder legislativo y jefe del cuerpo policíaco.
En los últimos 30 años, a comienzo de los 1990, durante la alcaldía de Xavier Suárez, Donald Warshaw, y más tarde, en 2011, Miguel A. Expósito protagonizaron situaciones similares.