Un volcán que lleva casi tres arrojando lava en la isla española de La Palma se calmó el martes, aunque los científicos advirtieron que esto no significa necesariamente que la erupción haya terminado.
Sur Florida / apnews
Los expertos no registraron actividad sísmica en Cumbre Vieja desde el lunes en la noche, dijo el instituto vulcanológico de las Islas Canarias, Involcan, en Twitter.
“Esto no implica una finalización de la erupción, ya que en ocasiones su cese ha sido seguido por un nuevo incremento de la actividad”, descrito Involcan, que agregó que era “el intervalo más largo sin temblor desde el comienzo de la erupción”.
Rubén López, un vulcanólogo de la institución, dijo que el volcán, que entró en erupción el 19 de septiembre, tenía una “actividad mínima”.
“Ojalá se pudiera mantener y podemos entonces empezar a ver el final”, apuntó en declaraciones a la televisora estatal española RTVE.
La erupción más larga de la que se tiene constancia en La Palma ha destruido alrededor de 3.000 inmuebles, sepultó grandes zonas de cultivo con lava y obligó a varias millas de personas a abandonar sus casas. No se reportaron daños personales directos por la erupción, que se han visto afectados especialmente en la parte suroeste de la isla.
La vida ha continuado casi con normalidad en la mayoría del territorio de 80.000 habitantes.
Las Islas Canarias, de origen volcánico, son un popular destino vacacional en toda Europa y se ubican frente a la costa noroeste de África.