Cuando el presentador chileno Mario Kreutzberger, más conocido como Don Francisco, llegó a Estados Unidos, se reconocía que en el país había casi 9 millones de hispanos. Hoy, 35 años después, los recientes censos indican que 62,1 millones de hispanos viven en la unión estadounidense, lo que representa un 18,7% de la población.
Sur Florida / diariolasamericas
“Se ha demostrado que nuestra comunidad es la de mayor crecimiento, y es algo lógico porque este país está rodeado de más de 300 millones de hispanoparlantes de diferentes países. Y todos hemos compartido el mismo sueño americano porque la economía y las oportunidades de EEUU son infinitamente mayores a las de nuestros países de origen”, dijo a DIARIO LAS AMÉRICAS el legendario comunicador, que por 53 años unió a la familia hispana alrededor de la pantalla chica en el extinto show de variedades Sábado Gigante.
“Yo creo que el gran desafío de nuestra comunidad es conseguir la representatividad que corresponde al porcentaje de la población que alcanzamos. Y cuando hablo de representatividad me refiero a nivel de municipios, estatal, federal y nacional. No se puede soslayar que los hispanos somos actores importantes en las votaciones”, dijo quien fuera el presentador del programa más longevo de la televisión mundial, y quien advierte que las nuevas generaciones de hijos de hispanos tienen una gran misión.
“Hay un porcentaje de hijos y nietos de hispanos que probablemente se van a integrar por completo a esta cultura, y se sentirán fundamentalmente estadounidenses. Sin embargo, el lazo con nuestros países de origen es algo que podemos mantener porque nosotros estamos relativamente cerca de nuestros familiares. Diferente es el caso de los inmigrantes de Asia o de Europa, que tienen que cruzar el mundo para mantener contacto físico con sus familias. Yo me pregunto qué pasará con la generación de los hijos de nuestros nietos, ¿hablarán o entenderán el español? Porque incluso para nuestros nietos el español como segunda lengua es un idioma que se les hace difícil, entonces habrá una lucha entre mantener la cultura y adaptarse completamente a una nueva”.
Celebrando sus raíces
Don Francisco decidió establecerse en Miami en 1986, hace más de 35 años, no obstante, siempre ha mantenido una estrecha relación con su país natal, Chile, adonde viaja regularmente ya que sus hijos y nietos viven de forma permanente allí.
“De mis 9 nietos, tengo 4 en EEUU. Todos nacieron aquí, pero han vivido mucho en Chile y por eso hablan ambos idiomas con mucha fluidez. Yo por mi parte hablo siempre en español con todos mis nietos, y estoy muy cercano a mi país”, dijo el presentador quien reconoce que aún no ha podido recuperar del todo la normalidad en medio de la pandemia.
“El no poder salir y viajar le carga a uno muchos años encima. Todavía no hemos recuperado todas las libertades, y pienso que hay cosas que aún no se saben de esta pandemia”.
Don Francisco pudo visitar 166 países con su famosa cámara viajera, hecho que le permitió aproximarse y aprender de diversas culturas, sin embargo, hay una de ellas que por su proximidad con Miami ha tocado especialmente su corazón.
“Durante todos los años que he vivido aquí he respetado mucho a los cubanos. En especial a ese exilio que desea volver a su país y que no ha podido. Yo sueño con que algún día todos los cubanos se puedan reencontrar en un solo corazón. Lo anhelo porque veo mucho patriotismo en cada uno de ellos, sin importar los años y las razones por las que hayan tenido que emigrar. Conozco muchísimo su cultura. De hecho, Cuba es el país fuera de Chile que más conozco porque durante 35 años he mantenido una estrecha relación con su gente”.
Consultado sobre su rol de presentador y sus nuevos proyectos especiales en cadenas como CNN en español, Don Francisco aseguró que sigue trabajando para el público latino dentro y fuera de Estados Unidos, y que anhela que los inmigrantes indocumentados tengan el estatus legal que merecen.
“Entreviste a muchos presidentes de Estados Unidos, demócratas y republicanos. A todos les hice las mismas preguntas sobre inmigración, y todos me dijeron que este problema se iba a solucionar. Por desgracia eso aún no ha ocurrido, y el problema de la inmigración sigue siendo mundial, difícil y creciente. Yo espero que se haga algo por los millones de inmigrantes que ayudan a que este país siga creciendo”.
Su legado en Chile y EEUU
Para un gran porcentaje del público hispano el mayor legado de Mario Kreutzberger en Chile ha sido el ser capaz de unir a su país frente a una causa social, por medio de la cual le dio visibilidad a la discapacidad en la mundialmente conocida Teletón de Chile, pero, en Estados Unidos, ¿cuál es su mayor legado? – le consultamos.
“Es posible que alguna vez yo le sugiriera a Chile que se uniera frente a una causa, pero lo que ha pasado en los últimos 43 años es porque los chilenos han querido unirse frente a esta campaña, y porque hemos demostrado que somos capaces de hacer algo único en el mundo”.
“El resultado de la Teletón de Chile está a la vista, porque de atender al 5% de los niños con capacidades especiales, 43 años después, atendemos al 93% de ellos en 14 institutos de rehabilitación de primer nivel construidos a lo largo de todo el país. Ese no es un legado mío, sino del país. Y en el caso de Estados Unidos… realmente no sé si uno deja un legado, pero yo dejé una empresa que ayudé a levantar [Univision] en la que cada sábado pude unir a la familia hispana alrededor de un televisor, y eso nos unió a todos como comunidad durante muchas décadas”, finalizó.
