El juzgado del condado de Leon, donde se encuentra la capital política de Florida, Tallahassee, dictaminó que el estado no puede imponer una prohibición a las escuelas públicas que exigen el uso de mascarillas contra el COVID, entretanto un tribunal de apelaciones determina última instancia si la prohibición es legal.
Sur Florida / Diario las Américas
El juez de circuito del condado de Leon, John C. Cooper, restableció así la suspensión de la orden estatal, después de que el estado presentara una moción de apelación al fallo inicial que suspendió el decreto del gobernador Ron DeSantis, que limita el uso de mascarillas contra el COVID en las escuelas a la decisión de los padres.
El juez Cooper aseguró que tiene “abrumadora evidencia”, presentada por el grupo de padres que demandaron al gobernador, de que “las mascarillas aportan protección a los menores, en particular a los menores de 12 años para quienes aún no existe una vacuna”.
“No estamos en tiempos normales. Estamos en una pandemia ”, señaló el magistrado durante la audiencia telemática. “Tenemos una variante (del coronavirus) que es más infecciosa y peligrosa para los niños que la que tuvimos el año pasado”, subrayó.
Desde que DeSantis firmó el decreto el pasado 30 de julio, 13 juntas escolares que representan a más de la mitad de los 2.8 millones de estudiantes de Florida han adoptado el uso de la mascarilla, con única exclusión solo por razones médicas.
En represalia, el Departamento de Educación de Florida anunció la retención del monto equivalente a los salarios de los miembros de la junta escolar en los condados de Alachua y Broward por no acatar el decreto sobre limitar el uso de mascarillas en escuelas a la decisión de los padres.
Entretanto, otros condados, como Miami-Dade, esperan una retención similar de fondos que sería entregada en el transcurso del proceso judicial.
Según los abogados de los padres demandantes, DeSantis “asume erróneamente que las autoridades estatales pueden determinar mejor los riesgos de salud y las necesidades educativas de estudiantes y maestros”.
Pero los abogados del estado respaldan la afirmación de DeSantis de que el derecho de los padres a optar por que sus hijos no cumplan con los mandatos de mascarillas se encuentra dentro de la Ley Derechos de los Padres que ratificó en junio pasado.
Sin embargo, el magistrado Cooper insiste en que el estado solo aplica una parte de la Ley de Derechos de los Padres, ya que “no puede infringir los derechos fundamentales de un padre” para dirigir la crianza, educación, atención médica y salud mental “de un niño” sin demostrar que tal acción es razonable y necesaria para lograr un interés estatal “.
Por otra parte, Miami-Dade, junto al Florida Student Power Network y padres demandaron igualmente al estado sobre la legalidad de decreto emitido por DeSantis.
