El matrimonio formado por Chrissy Teigen y John Legend acaba de terminar de instalarse en una nueva mansión de Beverly Hills, que compraron el año pasado por $18 millones de dólares y ya necesitaron volver a llamar al experto que les ayudó inicialmente con las tareas de decoración.
Sur Florida / eldiariony
Lo anterior se debe a que Chrissy golpeó en repetidas ocasiones la pared de una de las habitaciones hasta que logró romperla. Lo hizo porque escuchó un ruido entre los tabiques y sospechó que se trataba de Peanut Butter, el hámster de la familia que llevaba tres días desaparecido.
Todo el proceso de rescate quedó grabado por la pareja para compartirlo en sus redes sociales a fin de que nadie tachara de exagerada a Teigen y que no creyeran que eran alucinaciones suyas.
Se le ocurrió la idea de abrir un agujero a martillazos, pero las personas que la acompañaban consiguieron convencerla de que no lo hiciera.
Una alternativa que encontró fue desatornillar uno de los ventanales que da hacia su jardín para acceder a la cámara de aire situada entre el muro interior y el exterior, y efectivamente, en cuanto abrieron otro agujero apareció rápidamente la nariz de Peanut Butter.
Pero resultaba imposible mover el marco lo suficiente como para que su dueña introdujera la mano y lo sacara por la fuerza, por lo que no le quedó más remedio que usar semillas para intentar atraerlo.
Finalmente, el roedor salió por sus propios medios y la historia tuvo un final feliz. Por la sonrisa de oreja a oreja que exhibía Chrissy, salta a la vista que los daños a la propiedad no le importaban lo más mínimo.