Las autoridades de Florida pidieron al gobierno federal de Estados Unidos que un equipo adicional de rescatistas se una a la búsqueda de sobrevivientes entre los escombros de un edificio residencial colapsado, subrayando la naturaleza extenuante del operativo en una zona propensa al clima tropical.
SurFlorida / AP
La posibilidad de que en los próximos días el mal tiempo pueda sobrecargar más aún los recursos de búsqueda y rescate llevó a las autoridades estatales a solicitar refuerzos a Washington, explicó el martes Kevin Guthrie, de la División de Gestión de Emergencias de Florida. Hasta el momento, una mala climatología intermitente ha causado demoras temporales en la búsqueda.
Según Guthrie, el nuevo equipo, que podría llegar desde Virginia, estaría disponible si el mal tiempo sacude la zona en los próximos días y permitiría la rotación de las cuadrillas que llevan días trabajando en el lugar del colapso. Las autoridades señalaron que éste sigue siendo un operativo de búsqueda y rescate, aunque no se ha encontrado a nadie con vida desde las horas posteriores al derrumbe del jueves.
“Hay dos zonas de desarrollo (de posibles tormentas) en el Atlántico que se dirigen al Caribe. En Florida tenemos ocho equipos de rescate urbanos. Hablamos de dar un relevo”, manifestó Guthrie en una conferencia de prensa el martes en la noche. “Tenemos todos los recursos que necesitamos, pero vamos a traer otro equipo. Queremos rotarlos para poder tener más recursos ahí fuera”.
De acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes, en el Atlántico hay dos sistemas desorganizados de tormentas que podrían convertirse en sistemas tropicales en los próximos días, pero por el momento no está claro si supondrían una amenaza para Estados Unidos.
Charles Cyrille, de la Oficina de Emergencias del condado de Miami-Dade, dijo que 900 operarios de 50 agencias federales, estatales y locales trabajaban sin descanso en la búsqueda.
Funcionarios electos han prometido realizar múltiples investigaciones sobre el repentino colapso del Champlain Towers South, de 12 plantas, en Surfside la semana pasada. Otra víctima fue recuperada el martes de entre los escombros, elevando la cifra oficial de fallecidos a 12 personas, con 149 todavía desaparecidas.
La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, apuntó que ella y su personal se reunirán con expertos en ingeniería, construcción y geología, entre otros, para revisar los problemas de seguridad del edificio y elaborar recomendaciones “para garantizar que una tragedia como esta nunca vuelva a suceder”.
La fiscal del estado, Katherine Fernandez Rundle, dijo que llevará a cabo una pesquisa con un jurado investigador para examinar los factores y las decisiones que derivaron en la tragedia del jueves.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, mencionó un bien conocido compromiso militar de no abandonar a nadie en el campo de batalla y prometió hacer lo mismo con los desaparecidos.
“Como yo lo veo, como un veterano de la Marina, es que cuando alguien desaparece en combate, en el ejército, estás desaparecido hasta que te encuentran. No detendremos la búsqueda”, afirmó DeSantis en una conferencia de prensa el martes.
También el martes, la Casa Blanca anunció que el presidente, Joe Biden, y la primera dama, Jill Biden, viajarán a Surfside el jueves.
Los trabajos en la zona del derrumbe han sido delicados y peligrosos. El desplome dejó una capa de escombros sobre otra, lo que obstaculiza los esfuerzos para llegar a quienes pudieran haber sobrevivido en espacios vacíos.