El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, utilizó el miércoles su primera aparición pública en semanas para sugerir que Estados Unidos seguirá siendo hostil hacia la República Islámica incluso después de que el presidente electo Joe Biden asuma el cargo.
Sur Florida/Reuters
En su primera comparecencia pública desde que surgieron rumores a principios de diciembre de que su salud se estaba deteriorando, Jamenei dijo que no se puede confiar en Washington, un comentario que indica una actitud cautelosa hacia el sucesor del presidente Donald Trump.
En una reunión con los organizadores de los eventos que conmemorarán el primer aniversario del asesinato del comandante militar Qassem Soleimani en un ataque estadounidense en Irak, Jamenei dijo que el antagonismo estadounidense no desaparecerá con el fin del gobierno de Trump.
“Mi recomendación firme es no confiar en el enemigo”, dijo Jamenei en declaraciones difundidas por la televisión estatal.
“La hostilidad (contra Irán) no es solo del Estados Unidos de Trump, que supuestamente algunos podrían decir que terminará cuando se vaya, ya que el Estados Unidos (del presidente Barack) Obama también le hizo cosas malas a (…) la nación iraní”.
Biden fue el vicepresidente de Obama.
Más temprano en el día, el presidente iraní, Hassan Rouhani, dijo que está contento por el adiós de Trump, al que calificó como “el presidente estadounidense más forajido” y “asesino” por obstaculizar el acceso de Irán a las vacunas contra el COVID-19.
